Para apreciar los días luminosos, es necesario que la vida nos ponga, de vez en cuando, de frente a la oscuridad de las adversidades. Para valorar mejor las tardes de gloria, a veces toca vivir tardes cuesta arriba, de más penas que glorias, como la que se vivió esta tarde en Autlán, durante el festejo del segundo serial carnavalero.
Hicieron el paseíllo el rejoneador potosino Jorge Hernández Gárate, Ernesto Javier "Calita", Román y Diego San Román, para lidiar ocho toros de La Estancia. A petición del torero español, se modificó el orden de lidia, y Román lidió el primero y el segundo, pues debía conectar helicópteros y vuelos internacionales para presentarse mañana en Mérida, Venezuela.
Con la mente en los aeropuertos, Collado tuvo una tarde para el olvido. El primero de su lote se le fue vivo a los corrales, y al segundo apenas lo quiso ver para abreviar la faena. Escuchó reclamos y silbidos condenatorios al retirarse, aunque valga aclarar que los toros de La Estancia tampoco dieron muchas posibilidades.
Ernesto Javier "Calita" tuvo la actuación más firme, al primero que enfrentó, se llamó "Tequilero", muy incierto desde la salida, al que Calita, con mucho oficio, pudo lidiar y alcanzar a dibujar derechazos de buena factura. Luego, fallas en el acero lo alejaron del triunfo.
No así con el segundo, de nombre "Don Joaquín", al que, una vez que le encontró la distancia, una tanda por naturales y otra por derecha dejaron constancia del sitio en el que se encuentra. Fue meticuloso y, sin prisa, preparó la suerte suprema. Metió la espada, se mojó los dedos y fue premiado con una oreja.
Jorge Hernández Gárate emocionó al público, sobre todo con el segundo de la tarde. Además de ser generoso al engalanar el morrillo de "Bien Vivido", se dio al montar a "Velázquez" y usar su cabalgadura con la delicadeza de los vuelos de una muleta, llevando al toro cerquita de su estribo como si un hilo invisible los uniera.
Así, completaron en dos momentos distintos un par de vueltas al ruedo. También se dejó llegar el peligro de los pitones a escasos centímetros de sus piernas al colocar banderillas cortas y largas, pero no las tuvo todas consigo al tirarse a matar. El estoque cayó en mal sitio, y el juez de plaza no cedió a la presión del público que pidió una oreja. Fue sacado a saludar al tercio.
Diego San Román entró a la plaza con el pie derecho, pues recibió los premios que lo acreditan como el triunfador del serial autlense del 2024, además de la mejor faena y mejor estocada. Con el primero de su lote, ofreció probadas muestras del toreo que lo ha llevado a ser el rostro de la esperanza de la torería nacional: zapatillas bien plantadas en la arena, variado en el capote y la muleta para expresar emoción, que completa con un trasteo a la mínima distancia que no deja duda de su valor.
Le sacó más muletazos de los que parecía tener "Berrinches", pero defectos en la estocada diluyeron la posibilidad de tocar pelo, aunque le valieron saludar una ovación en el tercio. Más adelante con el que cerró plaza, no ofreció posibilidad alguna y abrevió. Se retiró en silencio.
Ficha Autlán de la Grana, Jal.- Plaza "Alberto Balderas". Segunda corrida de Feria. Tres cuartos de entrada, en tarde agradable. Toros de La Estancia, de presencia y juego variado. Pesos: 560, 530, 480, 524, 475, 530, 497 y 515 kilos. El rejoneador Jorge Hernández Gárate: Ovación en su lote. Ernesto Javier "Calita": Silencio y oreja. Román: Pitos tras tres avisos y silencio. Diego San Román: Ovación y silencio. Incidencias: San Román recibió los tres trofeos del carnaval 2024, como triunfador, mejor faena y mejor estocada, respectivamente.