La afición autlense, y los visitantes que vinieron de distintas regiones, retrataron su interés en taquilla, y la plaza "Alberto Balderas" lució un colorido lleno para cerrar el serial del carnaval Autlán 2025. En ese marco, los cuatro toreros que actuaron se entregaron sin reserva, para dejar variados matices que permitieron disfrutar la tarde.

Guillermo Hermoso de Mendoza refrendó su lugar de privilegio en el corazón de la afición autlense. Su actuación tomó altos vuelos en su lote. El primero se llamó "Troyano", de Villa Carmela, y mereció arrastre lento; el segundo, "No me olvides", de Montecristo, también mereció arrastre lento, así que el rejoneador tuvo toros para triunfar y no los desaprovechó.

Delante del primero se prodigó cabalgando de costado con los pitones pegados al estribo, cabalgando de costado con temple hasta completar vueltas al ruedo, quebró en la cara, pasó su caballo entre el toro y las tablas en un palmo de terreno y deleitó a la gente.

Con el segundo toro repitió el nivel de toreo y gustó mucho su faena el público, ya que tuvo entrega y variedad montando varios de sus caballos. Pero la diferencia fue que, con el primero, el acero le robó el triunfo que había ganado; y con el segundo estuvo más certero a la hora de matar y cortó dos orejas. Al final de la corrida salió a hombros y recibió el cariño del público.

Paco Ureña emocionó a la gente con su sobrio estilo. Su actuación fue consistente en ambos toros de su lote. Con "Ahijado Paco", y luego de lancear a la verónica con cadencia en el primer tercio, interpretó un toreo valiente, sin aspavientos, principalmente en dos tandas por naturales a media altura que tuvieron temple y calidad que al final le reportaron el corte de una oreja.

El segundo de su lote, "Sebastián Querido", se las vio con un toro que pronto se le vino abajo, al que resolvió metiéndose en sus terrenos, cuidando la colocación de la muleta para extraer, sobre todo, naturales que calaron en el tendido. Su actuación le valió un segundo apéndice que le permitió salir a hombros y le arrancó una sonrisa de los labios.

Octavio García "El Payo" no tuvo suerte en el sorteo y se las vio con un lote al que le faltó fuerza de remos, pero nunca se desesperó y buscó dar espectáculo. Sin embargo, el público le echó en cara lo que juzgó como ausencia de disposición del torero, hasta que anunció el regalo de un toro, el noveno de una larguísima corrida que duró casi cinco horas.

"Soñador", que fue el de obsequio, no estaba sobrado de fuerzas, pero sí tuvo la calidad suficiente para que el queretano planteara una faena elegante, en la que se recreó toreando con la mano derecha con la figura erguida y buen concepto del toreo. Su actitud volteó la moneda y convirtió en un digno y cariñoso saludo en el tercio una tarde que se le había planteado cuesta arriba.

Aunque no salió en hombros, Juan Pablo Sánchez continuó el idilio que tiene con el público de Autlán, ya que en esta plaza ha cosechado triunfos importantes a lo largo de los últimos años. El hidrocálido vivió los mejores momentos con su segundo toro, bautizado como "Amigo Toño", un ejemplar que acusó debilidad, pero Juan Pablo encontró la manera de lidiarlo, primero con la cadencia que le caracteriza, para después echar mano de recursos de alegría, como si el toro se hubiera contagiado. Se vino a más al momento de escuchar “Pelea de Gallos”, y luego de irse derecho tras el acero, el juez le otorgó una oreja, digno premio a su esfuerzo.

Así despedimos el carnaval 2025, con la esperanza de que el año entrante la plaza "Alberto Balderas" de Autlán siga siendo el referente a nivel nacional en esta época de alegría y unión, a través de esta preciosa tradición, la taurina.