Por unanimidad de las fracciones parlamentarias se aprobó la ley de protección de animales que incluye entre sus incisos la prohibición de las corridas de toros en el estado de Sinaloa, lo que implica otro golpe a la Fiesta que se ve seriamente afectada por distintos grupos animalistas.

La nueva ley vigente en materia penal contempla a los toros dentro de una supuesta pretensión punitiva, es decir, que implica castigo, maltrato o crueldad, que se tipifica con una pena de dos meses hasta dos años de prisión, que abarca el rango para animales domésticos, silvestres y ferales.

Cabe mencionar que las amenazas prohibicionistas existían desde hace varios meses, a propuesta encabezada por el partido de Morena, quienes finalmente acertaron el golpe a la libertad de decisión de los ciudadanos, y, de paso, eliminar una práctica cultural de primer orden, aprovechando la coyuntura electoral para genera empatía con distintos grupos animalistas.

Sin ser un estado eminentemente taurino, Mazatlán goza de tradición taurina al contar con el grupo de forcados más importante de la actualidad en México, encabezado por René Tirado, quien funge como promotor del espectáculo en esta región, no exento de trabas y tratos inadecuados por parte de las autoridades en turno.