Un nutrido grupo de unos 30 subalternos, tanto de la capital como del interior de la República, entre los que se encuentran  Adolfo Sánchez, Curro Campos, Alfonso Tapia, Carlos Ibarra, Rafael Bolaños, Cristhian Sánchez, Ignacio Melendez o Gustavo Campos, están solicitando que se rindan cuentas en la Unión Mexicana de Picadores y Banderilleros, con la finalidad de que se pueda conocer el estado real de las finanzas de la agrupación.

"Estamos preocupados por la situación que vive la Unión,  pues es inquietante que no se afronten los pagos de fondos de retiro, como el que se adeuda al picador Víctor Ortega desde hace más de un año, pues debido al riesgo de trabajo sufrido en una corrida de toros, quedó incapacitado para seguirse desempeñando en la profesión, y a otros miembros a los que estatutariamente les corresponde su retiro (indemnización)", comentó Alfonso Tapia.

Según los subalternos en cuestión, desde 1998, presumiblemente, se han ido diezmado poco a poco las arcas de la agrupación, y se ha pedido al actual Comité Directivo, que encabeza Fernando García Araujo, que se esclarezcan los manejos económicos de la UMPyB, pero hasta ahora no han tenido una respuesta convincente sobre este asunto.

"En la última asamblea del mes de diciembre solicitamos que se rindan cuentas claras, pues a todos los miembros nos interesa saber cómo se está manejando el patrimonio derivado de nuestras cuotas de actuación, fondos de reserva y otros ingresos, pues nadie quiere que ocurra en un futuro lo que le está pasando a Víctor Ortega", dijo el banderillero mexiquense.

Asimismo, Alfonso Tapia, que tiene 24 años de miembro activo en este sindicato, comentó que existe inconformidad con respecto del desmpeño del comité actual, así como de otros que han ejercido en el pasado la representación profesional de la agrupación ante las diversas empresas, situación que ha dañado y sigue dañando la imagen profesional de la Unión, que se había caracterizado por estar abierta a negociar con los estamentos que conforman la Fiesta, en beneficio de sus socios y del espectáculo:

"Ejemplo de ello es el hecho de que ahora mismo no se estén dando novilladas en la plaza Arroyo, con miembros de la Unión. Y es preocupante, ya que los subalternos que suelen torear en esta plaza, año con año, están dejando de tener un ingreso. Y no sólo eso, sino que también se está impidiendo que nuestra agrupación participe profesionalmente en la Fiesta. Ojalá que este conflicto pueda solucionarse a la brevedad, para beneficio de la todos y, por supuesto, de nuestra agrupación", concluyó.