El maestro Paco Camino ya descansa en paz, luego del entierro del féretro que contenía su cuerpo, y que tuvo lugar esta mañana en Sevilla, adonde se dieron cita familiares, como su viuda Isabel o su hija Marián, amigos, admiradores y muchos toreros, que venían en su sabiduría taurina una enorme fuente de enseñanza e inspiración.
Del ayuntamiento de Camas, su localidad natal, vecina de Sevilla, salió el cortejo fúnebre para la parroquia de Santa María de Gracia donde se llevó a cabo la misa y, posteriormente, el trayecto hacia el cementerio, momento que aprovecharon varios toreros para llevarlo a hombros, como tantas veces salió de las plazas del planeta de los toros.
De épocas pasadas, como Curro Romero, en silla de ruedas por su reciente fractura de cadera; Manuel Benítez "El Cordobés", que fue uno de sus rivales más directos, o su discípulo y ahijado de alternativa, Pedro Gutiérrez "El Capea"; pero también Emilio Muñoz o Juan Antonio Ruiz "Espartaco", la figura de los ochenta, o José Tomás, con el que le unía una estrecha relación, no quisieron perderse este último adiós a un torero en el que se combinaron la naturalidad y la elegancia; la claridad de ideas y el poderío; la gracia sevillana y el arte.
Su hijo Rafi Camino y Miguel Báez "Litri" también fueron dos de los toreros presentes, no en vano el maestro de Camas estuvo delante de ambos el día en que se les concedió la alternativa en Nimes en 1987, con el maestro Litri entre la pareja de padres e hijo de aquella inusual doble ceremonia.
Otros toreros que estuvieron en la cita fueron Miguel Abellán, Pedrito de Portugal, Julio Aparicio, Serafín Marín, Martín Pareja Obregón, Oliva Soto, además de Curro Durán, padre e hijo.
Los comentarios, las remembranzas, los recuerdos, se agolparon en un mismo lugar, todos dirigidos a señalar la grandeza de un torero que en México fue un ídolo que 15 años más arde vino a recoger la estafeta de consentido que había dejado vacante el inolvidable Manolete con su muerte.
Y así se fue hoy a reposar el maestro Camino al cementerio municipal de su tierra, rodeado de admiración y cariño, y a la distancia también desde esta orilla del Atlántico donde su hijo Paco, el primogénito, se la adelantó en octubre del año pasado. Ahora ya están juntos. Descanse en paz.