El novillero Arturo Gilio retomó sus entrenamientos y preparación física tras recuperarse de la lesión de cervicales que lo mantuvo tres semanas inactivo, a consecuencia de la fuerte voltereta que sufrió durante una jornada de tienta en la ganadería guanajuatense de Juan Antonio del Hoyo.

Gilio, en compañía de su padre, el matador de toros del mismo nombre, así como el resto de su equipo, sesionaron en el centro del ruedo del "Coliseo" de Torreón, Coahuila, en jornada que incluyó además toreo de salón, una mañana que transcurrió con normalidad y sin que el joven torero presentara alguna molestia.

En todo momento se mantuvo la vigilancia médica con el fin de evitar cualquier contratiempo que pudiera mermar la salud del diestro, pues como se recordará resultó con un traumatismo craneoencefálico, y un esguince cervical de segundo grado del que se reporta se recuperó de manera satisfactoria.

La mira de Arturo Gilio se dirige de manera permanente en regresar a España, donde este año ya tenía varios compromisos firmados que, finalmente, fueron suspendidos a causa de la situación sanitaria mundial, por lo que no quita el dedo del renglón en retomar su gira y presentarse en ferias y plazas de primera categoría.