El empresario y ganadero Juan Pablo Corona tuvo un gesto de gratitud con el matador Andrés Roca Rey, con motivo del brindis del toro "Empanado" de Victoriano del Río, que el torero peruano le hizo el pasado 15 de junio en la plaza de Las Ventas de Madrid, durante la pasada Feria de San Isidro.

En agradecimiento a esta distinción, le obsequió un precioso capote de paseo con la imagen de la Virgen de la Macarena, patrona de los toreros, que Andrés recibió sumamente emocionado, no sólo por la calidad de la prenda y el significado de la imagen religiosa bordada toda a mano, sino por la esencia de un regalo que no esperaba, y que representa una devoción de Sevilla, donde el joven espada limeño tiene su residencia en España.

Este encuentro tuvo lugar en un reservado el restaurante The Palm del Hotel Presidente Intercontinental de la Ciudad de México, la víspera de la Corrida Guadalupana en el coso de Insurgentes, adonde el torero llegó acompañado de su cuadrilla, compuesta por los banderilleros Francisco Durán "Viruta" y Paco Gómez, el picador José Manuel Quinta, así como su mozo de espadas, Manuel Lara "Larita".

El capote es de color verde botella y oro, y el dibujo de la imagen es uno muy antiguo que la maestra Nati rescató de los archivos de su madre, la iniciadora de este taller de toreros tan reconocido en el mundo del toro y que el empresario entregó en representación de su familia, que en este evento también estuvo representada por su hijo Juan Pablo.

Tanto las fotos de Óskar Ruizesparza y el video que acompaña esta información, demuestran el momento tan emotivo en que Andrés agradeció la entrega de este obsequio por parte de Juan Pablo, quien además de ser su apoderado en América, bajo la firma de Casa Toreros, mantiene una relación de respeto, cordialidad y admiración con esta joven figura del toreo, según quedó constancia en el texto que fue bordado por la parte trasera de este precioso capote de paseo.