Antes de dar inicio al festejo fueron homenajeados los hermanos Vicente y Elías Esparza por cumplir 25 años de docencia taurina; al finalizar la tarde, Frausto se llevó la única oreja en la espuerta, mientras que Galindo recibió una cornada de consideración. La materia prima procedió de la dehesa de Fermín Rivera.

Ricardo Frausto compareció por segunda vez en la presente temporada y consciente de lo que ello implicaba se enfrentó en primer término a "Polvorón", un novillo de buenas condiciones, después de lancear a la verónica proyectó un quite por ajustadas gaoneras.

Con la muleta y clavando las zapatillas en la arena ejecutó varios cambiados por la espalda, mismos que fueron seguidos por varias tandas por el pitón derecho, en donde la ortodoxia de su toreo se puso de manifiesto, por un instante la faena pareció venir a menos, pero retomó intensidad cuando por naturales aprovechó las buenas condiciones del novillo, para coronar su actuación mató de manera efectiva para pasear la única oreja del festejo.

El quinto de la tarde procedió de la ganadería de La Playa y por ello llevó el nombre de "Playero", con el cual Frausto intentó redondear su actuación, con el percal estuvo muy voluntarioso y con la franela inició su labor doblándose hacía los medios, varias tandas por ambos lados rematadas con toreros adornos, lamentablemente falló con el acero y se limitó a saludar en el tercio.

Antonio Galindo llegó dispuesto a triunfar en la centenaria plaza "San Marcos" y por ello con el que abrió plaza se fue a los medios para recibir a "Membrillo", con un vistoso farol de rodillas, acto seguido proyectó cadenciosas verónicas y un quite compuesto por chicuelinas y tafalleras, con la muleta, intentó correr la mano por ambos lados, lamentablemente las condiciones del novillo fueron poco propicias, tras fallar con la espada se fue a tablas entre palmas.

En cuarto lugar saltó a la arena "Turrón", otro buen novillo que desde su salida proyectó la emoción en los tendidos. Galindo le echó afición recibiéndolo con una larga cambiada, luego el lance fundamental y un quite por chicuelinas complementaron su labor con el percal.
 
Para iniciar su faena clavó las zapatillas en los medios de la plaza y esperó impávido la embestida del burel, mismo que arremetió hacía el joven tlaxcalteca llevándoselo por delante e infiriéndole una cornada en la región peri anal de aproximadamente 15 centímetros de profundidad; cabe destacar la hombría de Galindo, que intentó terminar con su enemigo pero las asistencias médicas se lo impidieron. Por lo anterior, fue Ricardo Frausto quien dio muerte al bravo novillo.

El tercer espada fue el novillero peninsular Luis Gerpe, que tuvo una actuación de luz y sombra, con su primer enemigo que fue anunciado como "Tres Leches" apenas si se acomodó con el capote y a pesar de algunos detalles anduvo sin encontrar la distancia adecuada, además de no descifrar las embestidas de un buen novillo, se retiró al callejón en silencio.

Con el que cerró plaza Gerpe cambió la cara de la moneda, con el capote se recreó con las verónicas y un bello remate. Sin embargo lo más artístico llegó con la muleta en donde las tandas por ambos pitones proyectaron a los tendidos, la faena además, estuvo complementada por toreros detalles y vistosos adornos, por momentos su labor alcanzó altos vuelos pero lamentablemente falló con el acero y perdió una oreja que tenía ganada, a cambio escuchó hasta dos avisos.