Premian por partida doble en La México
Con una oreja para Jesús Sosa y una vuelta del ganadero Lomelí
Jesús Sosa cortó la única oreja de la segunda novillada en la Plaza México que, aunque algunos cuestionaron, premió la actitud que mostró en el turno de su debut, y también en el sexto, después de cuya lidia el ganadero saltillense Fernando Lomelí fue obligado a dar una merecida vuelta al ruedo.
El ganadero fue reconocido por un encierro en el que además de su buena presentación y bravura, hubo dos novillos con carácter de extraordinarios -segundo y cuarto, éste al que le dieron arrastre lento- y el resto se dejaron torear a lo largo de la tarde.
Firmeza tuvo la actuación del zacatecano César Pacheco quien debutó el día de hoy con el astado que abrió el festejo, mientras que Luis Martínez cumplió con decoro. Unas tres mil localidades fueron ocupadas por un publico notoriamente más taurino y exigente que la semana anterior.
Sosa deleitó al público con lentas verónicas acompañando con la cintura y después un quite por gaoneras, ya con la muleta le faltó hilvanar la faena, pero destacaron algunos episodios en lo cuales consiguió muletazos largos y templados. Tras un pinchazo y un fuerte revolcón se levantó para dejar una estocada efectiva y entera que le valió cortar una oreja tras petición mayoritaria, trofeo que después protestó un cierto sector del público.
En el sexto volvió a mostrar actitud desde con el capote ante un novillo siempre pendiente de lo que dejaba atrás, tanto así que lo revolcó. Luego de un pinchazo, dejó una estocada entera con un nuevo revolcón sin consecuencias. Al final de la lidia, Fernando Lomelí dio una emocionante vuelta al ruedo en compañía de sus hijos.
Lució con el capote el zacatecano César Pacheco en el primero de su lote, con una labor de mucho mérito por la seria presencia de su ejemplar que resultó exigente, con fuerza y boyantía que provocaron el tumbo del picador César Morales. Pacheco anduvo firme y cuando se pudo logró muletazos estéticos, pero sobre todo el público le aplaudió su disposición ante la presencia del astado. Tras un pinchazo y una estocada concluyó su faena que le valió una ovación en los medios.
Su segundo tuvo nobleza y le permitió al zacatecano lucir con temple en tandas por el lado derecho que fueron coreadas por el público que estuvo con él durante el festejo. La faena se le vino un poco a menos y en cuanto escuchó algunas protestas entró a matar con una estocada entera. Tras su labor, hubo petición de oreja que no concedió el juez, quien ordenó arrastre lento al novillo. Ovación en el tercio.
Mucha calidad y temple mostró el segundo de la tarde, ejemplar que saltó de salida al callejón, dando casi media vuelta al ruedo, consecuencia que acusó en la faena de muleta doblando las manitas en algunas ocasiones. Luis Martínez consiguió detalles de buen toreo al principio aunque su faena tuvo marcados altibajos y por ello no tomó altura, lo que fue más evidente ante las bondades de un novillo bravo y bueno. Tras ajustadas manoletinas pinchó y escuchó palmas.
Lo mejor de su segunda faena fue la certera estocada con la que concluyó una faena en la que no se encontró con las claridad del astado.
Ficha
Ciudad de México.- Plaza México. Segunda novillada de la temporada. Menos de un cuarto de entrada (unos 3 mil espectadores), en tarde soleada al principio, con viento y con amenaza de lluvia al final. Novillos de Fernando Lomelí, de buena presencia y hechuras, bravos en el tercio de varas, manejables en su conjunto, de los que destacó el 4o., que fue premiado con arrastre lento. César Pacheco (lila y oro): Ovación y ovación tras petición. Luis Martínez (berenjena y oro): Ovación y silencio. Jesús Sosa (malva y oro): Oreja con protestas y ovación. Incidencias: Lució en banderillas Gerardo Angelino, quien saludó una ovación en el 3o. Al terminar el festejo, y a petición del público, el ganadero Fernando Lomelí dio una vuelta al ruedo acompañado de sus hijos, uno de los cuales bajó del tendido.
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