La fiesta de los toro vive momentos de incertidumbre y angustia en Colombia, ya que la senadora Esmeralda Hernández sigue presionando en el congreso local con un proyecto de ley prohibicionista que pone en riesgo miles de puestos de trabajo en todo el sector campesino, y el peligro que también representa para otras expresiones culturales del país como el coleo, las corralejas y los gallos.

En días recientes se han llevado a cabo distintos debates públicos alrededor de los toros en un país con gran tradición taurina, que ha aportado varias figuras del toreo de talla internacional y cuya relevancia en América, a lo largo de las décadas, ha sido fundamental para la Fiesta en un país gobernado actualmente por Gustavo Petro, quien durante su gestión como alcalde de Bogotá hizo todo cuanto estuvo en sus manos para acabar con los toros.

El ganadero Gonzalo Sanz de Santamaría, propietario de la divisa de Mondoñedo, declaró al prestigiada revista Semana sobre la actualidad política y legal por la que atraviesan las corridas de toros en Colombia, situación que podría definirse durante los próximos días a través de una votación directa por parte del congreso local.

Añadió que Colombia es un país que presenta severos problemas sociales, entre ellos el hambre, en contraparte a los cerca de 200 toros toros que mueren en un año, un promedio de menos de un toro por día. Por ello cuestionó el por qué la clase política no trabaja sobre los temas importantes para la sociedad en vez de atacar a la tauromaquia.

"Están viendo cómo acaban los poquitos empleos que tenemos en un país tan necesitado. Abren una caja de Pandora tan peligrosa como el prohibicionismo. ¿En un futuro nos van a prohibir Netflix porque tiene imágenes de violencia, o los videojuegos y las películas para adultos?", comentó.