Aficionados, amigos y forcados de toda la vida, se dieron cita en Pachuca para despedir a Bruno Vogt Iturbe, fallecido el viernes 7 de julio, en una ceremonia cargada de tristeza y emoción, tras haber sido velado en la agencia funeraria Arriaga, a la que siguió un evento de carácter nostálgico.
Y como no podía ser de otra manera, este sentido homenaje póstumo tuvo su epílogo en la Monumental "Vicente Segura", adonde fue llevado para que ahí se oficiara una misa en su memoria, a la que siguió una vuelta al ruedo, donde dos cabos del grupo de Forcados Mexicanos, Fernando Blanco y Emilio Baca, y del grupo de Amadores de Hidalgo, Alejandro Espínola, fundador, así como Guillermo Espínola y Juan de Dios Corona, cargaron el ataúd.
Posteriormente, ya en los medios, distintos personajes, amistades y familiares le dedicaron emotivas palabras para despedirlo y para honrar su memoria, merced de lo que cosechó en vida, tan querido amigo y singular personaje de la Fiesta de los toros, antes de que una banda de música comenzara a tocar algunos pasodobles, corridos, y las consabidas "Golondrinas".
Finalmente, el cortejo se encaminó al cementerio municipal, donde, los que se dieron cita, no dejaron de elogiar la vida de este personaje; de su trayectoria y la aportación que dejó en cada una de las personas presentes, que recordaron anécdotas y vivencias a su lado. Hombre de bien conocido por aficionados del toro y los profesionales, a los que deja un legado y ejemplo de afición incansable, pese a haber enfrentado circunstancias muy difíciles como fue la muerte de su hijo del mismo nombre, ocurrida en febrero del año 2021.
Ahí queda su recuerdo como persona, forcado y un amigo, que campeó la vida de la manera como su destino le enseñó. Descanse en paz.