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Leo Valadez, primer triunfador de León

Sábado, 21 Ene 2023    León, Gto.    Raúl Magos | Foto: NTR          
El hidrocálido cortó dos orejas por una de Andrés Roca Rey
La primera corrida de la Feria León 2023 dejó varias notas para resaltar, comenzando por el ambiente y el lleno en el tendido −ojalá presagio de un serial exitoso por las entradas−, el triunfo de un torero mexicano que arrea en una tarde de compromiso ante una figura consagrada, y por esencial que parezca, que la gente, aún con ambiente de feria, hace alzar su voz cuando considera que lo que se le ofrece a cambio de pagar el boleto, no está a la altura de lo que espera. Este principio, que debería darse por descontado, no estaría mal que se recordara en cada festejo que se organiza, sobre todo en estos tiempos revueltos para la Fiesta.

Dentro del conjunto del encierro destacaron por su calidad, con diferentes matices, los corridos en primero y tercer lugares, y fue a este último al que le cortó las dos orejas el hidrocálido Leo Valadez, en una faena marcada por la actitud y la forma inspirada de improvisar conforme las condiciones del toro lo iban requiriendo. Porque "Mi querer" fue encastado y de salida pareció no entregarse en el capote de Leo, que al ver que el toreo fundamental no estaba resultando, improvisó con un volcánico recibo por gaoneras. Tras el tercio de varas, donde hubo un tumbo, cubrió de manera excepcional el segundo tercio, clavando los palos prácticamente en el diámetro de una moneda. 

En el último tercio, Leo entendió a cabalidad las embestidas encastadas del toro −bendita transmisión−, improvisando en el inicio por alto con una ajustadísima arrucina en un momento donde el toro se le revolvió. Sobresalieron los derechazos mientras el toro tuvo fuelle, y para rematar, una temeraria serie de manoletinas de rodillas antes de preparar la suerte suprema. 

Colocó una estocada entera y apenas desprendida, para recibir las dos orejas del encastado toro de Begoña. Por contra, en el que cerró plaza solo pudo estar voluntarioso, ante las complicadas condiciones de un toro que fue a menos. Ojalá se prodigue la combinación de Leo Valadez y Roca Rey, ya que se percibe que compartir cartel motiva especialmente al hidrocálido.  

El otro toro de calidad fue el primero, del que destacó su clase, y al que recibió José Mauricio con un cadencioso toreo a la verónica. El único pero es que el toro llegó al último tercio con la fuerza justa, aunque mientras duró, le toreó con mucho gusto por derechazos, ya que por el izquierdo el toro se revolvía pronto. 

Ejecutó de manera magnifica una estocada al volapié, y aunque el espadazo fue entero, quizás quedó algo tendido y el toro tardó en doblar, lo que hizo que se enfriara el entusiasmo en el tendido y que le llegaran a sonar un aviso. De haber doblado el de Begoña, seguramente José Mauricio hubiera tocado pelo merecidamente. El cuarto, sin recorrido, no le dio opciones.

Roca Rey tuvo una actuación acorde a su condición de figura del toreo. A su primero, complicado desde el capote, le hizo todo con mucha firmeza, dejando constancia de la serenidad que da el saberse dueño de recursos que se adaptan a las condiciones de todo tipo de toros. 

La reflexión, para todos, ocurriría a partir de la salida del quinto, un toro que contrastó −para mal− por su presencia en comparación a los primeros cuatro. En una bronca pocas veces vista en "La Luz", el público mantuvo su posición desde que el toro salió al ruedo, y al contrario de otras tardes donde las protestas van diluyéndose, en este caso no pararon sino hasta que el toro fue devuelto a los corrales por su evidente falta de trapío.

Saldría un toro de similar conformación, un toro bajito y con menos peso que el regresado, y quizás el público consideró que se había salido con la suya en el toro titular, ya que a éste ya no lo protestó. El toro, aunque con la fuerza justa, tuvo recorrido, y eso bastó para que Roca Rey le hiciera una faena larga y prácticamente hiciera lo que quiso con el toro. Quizás la presencia del toro, y la falta de transmisión, hicieron que la gente no entrara rápido en la faena, y no fue sino hasta que el toro trompicó a Roca Rey, que el público se metió de lleno a lo que pasaba en el ruedo. 

Decíamos que Roca Rey estuvo en figura, por su entrega y la forma de adaptarse a las distintas condiciones de los toros, aunque queda el "sabor incómodo" de ver cómo la grandeza de un torero tan importante para la Fiesta, que ha llegado a donde está zumbándose el toro de Madrid y tantas otras plazas, contrastaba con la presencia de ese 5o bis. El público, soberano, coreó lo bueno y solicitó la oreja para Roca Rey, aunque también se hizo escuchar cuando lo consideró necesario. Conviene de vez en cuando no olvidar esa voz.

Ficha
León, Gto.- Plaza "La Luz". Primera corrida de Feria. Lleno, en tarde soleada, con leves ráfagas de viento. Siete toros de Begoña (5o. bis) de presencia y juego desigual, de los que destacaron 1o. y 3o.; éste recibió arrastre lento. Pesos: 505, 525, 505, 495, 470 y 520 kilos. José Mauricio (tórtola y oro): Ovación tras aviso y palmas. Andrés Roca Rey (azul noche y oro): Palmas y oreja. Leo Valadez (nazareno y oro): Dos orejas y palmas.


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