Saldívar con su primero después que el toro correteó por el ruedo lanceó a pies juntos y tras el puyazo apenas señalado hubo un buen par de Ángel González. Brindó al respetable aprovechando al de Coroneo que repetía con buen estilo.

Inició con dos cambiados por la espalda seguidos de series sobre la diestra, teniendo pronta respuesta del público y mantenida al dibujar los naturales. En la parte medular del trasteo una dosantina ligada en apretado terreno con la arrucina. Volvió al lado derecho mientras el público seguía metido en la faena cerrada con manoletinas y culminada de estocada entera entre gritos de ¡torero, torero!  para recibir en premio un par de apéndices.

Su segundo fue de Barralva y en los primeros momentos de la lidia clavó los pitones en la arena sin alcanzar a dar la vuelta sino aún peor, se le dobló el cuello con todo el peso encima lo que afectó mucho perdiendo las manos de continuo por lo que abrevió y anunció un regalo.

De Coroneo fue el que obsequió Arturo, apenas le señalaron el puyazo y más tarde con la muleta el torero mostró solo voluntad para sacarle partido lo que consiguió en contadas ocasiones antes de fallar con el estoque. Silencio.

No habiendo tenido José Mauricio suerte en su lote, decidió regalar uno justo de presencia al que toreó bien con el capote tanto en el recibimiento como al quitar por navarras. Animoso fue su trasteo iniciado con un cambiado e ir subiendo de tono hasta que se empezó a rajar el de Barralva, lo mató de pinchazo arriba y gran estocada siendo llamado a recorrer el anillo.
 
Ante su primero el diestro de Mixcoac desplegó la buena técnica que posee con la capa cumpliendo el toro en varas, con la franela trató de lucir sin embargo el toro se le frenaba optando por torearlo de pitón a pitón con eficacia. Dejó hábilmente estocada entera que no hizo efecto, sonó un aviso antes de acertar a la primera con la espada corta, el toro fue pitado en el arrastre y el torero escuchó palmas.

El quinto que se despitorró en varas fue sustituido por uno de Real de Saltillo, se vio poco de capa y si un buen puyazo de Erick Morales cambiándose el tercio de banderillas con dos pares. Bien se dobló José Mauricio que aguantó la descompuesta embestida por ambos perfiles, logrando muletazos meritorios jugándose en serio el físico; se había hecho acreedor a algún premio aunque se le escapó con el acero escuchando un aviso.

Poco juego ofreció el que abrió plaza y correspondió a Fermín Rivera que se dio cuenta y solicitó pronto el cambio de tercio, hubo un buen par de Gerardo Angelino y del aspirante Gustavo Escobedo. Con la muleta se puso cerca Fermín para provocar la arrancada sin gran respuesta, estrellándose la voluntad del torero ante esas condiciones además pinchó varias veces, vino un aviso antes de la estocada definitiva y se retiró en silencio.

Lances de trámite le vimos en su segundo al igual que el puyazo y el tercio de banderillas. Empezó el potosino con estatuarios aguantando y ya en los medios, consiguió los mejores muletazos al natural con vehementes deseos de agradar, en tanto el toro se empezó a escupir de la tela de modo que terminó su labor cerca de tablas con medio espadazo tendido para que le sonaran las palmas.