Todavía se recuerda con agrado cuando hace casi 20 años surgió el concepto de Tauromaquia mexicana, ideado por un grupo de profesionales y ganaderos mexicanos con el fin de descubrir nuevos talentos en la torería y de los cuales emergieron varios de los toreros actuales.

De entonces a la fecha han pasado casi dos décadas y ante la necesidad de ir sumando nuevos nombres a la baraja taurina mexicana, son ahora los propios ganaderos quienes se han dado a la tarea de apoyar a los nacientes aspirantes a ocupar algún día su nombre los carteles de nuestras plazas.

Se trata del concepto "Campo para Novilleros" que comenzó hace unas semanas gracias a la idea de cuatro ganaderos y que, poco a poco, busca ir sumando muchos más en un proyecto que dará sus frutos a mediano y largo plazo.

"Es un plan bonito que es para todos, no es exclusivo de nadie, es exclusivo de la Asociación Nacional de Criadores de Toros de lidia, de todos los socios. Creo que va a tener buena acogida y una vez que empiecen a desarrollarse más tientas, creo que vamos a tener muchísimos más ofrecimientos de vacas y novillos en otras ganaderías y en muchos estados, que es la intención", expresó Germán Mercado Lamm, ganadero de Montecristo y presidente de la Asociación.  

Dijo que, así como aquella vez apoyaron Tauromaquia mexicana, ahora lo harán en esta nueva etapa.

"Esto no es algo nuevo en este país, por alguna razón se dejó de hacer muchos años. Cuando empezó Tauromagia mexicana, en la que El Payo, Saldívar y todos esos muchachos que ahora son matadores y jalan el carro, tenían entre 10 y 11 años, un grupo de 12 ganaderos juntamos 700 vacas en un año y más de 40 novillos. La forma en que ellos desarrollaron rápidamente y escalaron en forma vertiginosa su profesión, fue de alguna manera respaldada por tanto campo", agregó.

El ganadero de Montecristo consideró que, en la época actual, por la pandemia que obligó a los ganaderos a adelantar camadas y desprenderse de muchas vacas, sería difícil volver a juntar 700 vacas como aquel entonces, pero sí es bueno que los socios ganaderos aporten en la medida de sus posibilidades, vacas para que los nuevos muchachos se vayan formando.

"A las primeras tientas que hemos tenido, los muchachos que han ido han valido la pena. Como es natural unos están más puestos que otros, los que no están tan puestos quiere decir que no se les dará otra oportunidad, lo que pasa es que se tiene que ir haciendo, como todo en la vida, una selección de los que están más adelantados o transmiten más o tienen más probabilidades. A estos se le aumentará el número de vacas (para que vayan madurando todavía más) sin que los demás dejen de estar toreando, esto creo que es una idea interesante, romántica, pero es lo que hay que empezar así yo creo".

Manifestó que este nuevo plan surgió al principio de ver la necesidad que existe en la torería nacional de que los novilleros tengan campo, de que se vayan placeando y vayan viendo de forma viva cómo embiste un animal y no que todo sea entrenamiento de salón y a su vez para que los nuevos chavales vayan desarrollando facultades, intuición, valor, vocación, etcétera.

"Este plan básicamente consiste en conseguir vacas en el campo, de las cuales ya tenemos más o menos unas 150 y hemos empleado unas 405, exclusivamente para muchachos nuevos, no los novilleros punteros o los que ya están toreados. Esta es una forma de poder placear en el campo a muchos muchachos en distintos estilos, de personalidad, que vayan siendo afines a diferentes encastes y ganaderías, con lo cual se vuelve a tener competencia y, con la competencia, eficiencia, transmisión y así todos salimos ganando", señaló.  

Campo para Novilleros no tiene ninguna cuestión política, puesto que aquí es abierto para todos, para todas las escuelas taurinas y todos los ganaderos que se quieran sumar al proyecto son bienvenidos.  

"Queremos que se sumen todos los ganaderos, que se sientan partícipes de un proyecto para buscar toreros, por eso se llama el Campo para Novilleros o Novilleros para el Campo, como le gusten llamar", concluyó.