Tras comprobar que Fermín Espinosa "Armillita IV" tiene un gran potencial y que ha adquirido una madurez como torero en los últimos años, Alfredo Ríos "El Conde" decidió apoderarlo, cuando oficialmente la empresa Tauro Espectáculos lo dio a conocer el día de ayer.
"Vamos hacer de Fermín un torero que a los públicos les interese, que al verlo anunciado en los carteles tengan ganas de ir a verlo. De esos públicos que quizá lo veían en su momento como un torero mimado y de fáciles oportunidades, pero verán que no es así, que realmente es un torero que vale la pena y al que vamos apoyar decididamente", expresó el matador en retiro, empresario y ahora apoderado.
Dijo que la posibilidad de apoderarlo ya se la había propuesto desde hace tiempo el matador en retiro Fermín Espinosa "Armillita", padre del torero, pero debido a que Ríos todavía estaba en su campaña de despedida no le había sido posible aceptar la propuesta.
"Él me decía que necesitaba alguien que estuviera con Fermín las 24 horas del día como su apoderado, que le gustaría que fuera yo, quizá por mi forma de ser, o por los conceptos que hemos hablado y en los que siempre hemos estado de acuerdo", agregó.
"Yo tenía un concepto de Armillita IV como lo tiene todo mundo, equivocadamente, de que era un torero muy acomodado, pero un día siendo rivales todavía toreó conmigo aquí en Guadalajara que es donde yo realmente mido a los toreros cómo andan, por la seriedad de la plaza y por el toro que aquí se echa y realmente ese día estuvo cumbre.
Ahí cambié mi concepto de lo que yo pensaba, porque realmente no lo había visto torear. Ese día estuvo muy bien. Luego, cuando me hago empresario en sociedad con Bustamante en Tijuana, en el primero que pensé en llevar fue a Fermín. Lo puse y triunfó y enseguida toreó la de triunfadores y volvió a cortar otras dos orejas y ahí ya me convenció definitivamente", expresó El Conde.
Agregó que este año lo vio torear de nueva cuenta en Ameca, en los Carnavales, donde volvió a estar cumbre y ante la nueva petición de Armillita padre de apoderar a su hijo, esta vez le dijo que sí.
"Uno de los primeros requisitos que yo les pedí es que me lo dejaran totalmente solo. El maestro me dijo que solamente nos acompañara en alguna corrida, pero que pensaba que yo era el indicado para acompañarlo, mientras que el torero me dijo que sí, que él cree que vamos hacer una buena mancuerna".
Dijo que al integrarse al equipo como apoderado, Tauro Espectáculos, empresa que lleva también sus poderes, le tiene contemplado para presentarlo en los festejos donde sean empresa, de la misma forma como él lo pondrá en las plazas donde sigue siendo empresario, como en la de Tlaquepaque, por ejemplo.
"Mi plan también es potenciar a Fermín en España, al unísono tanto allá como aquí, en eso estamos de acuerdo. Él –Fermín– quiere competir allá y bueno, alguna oportunidad se le dará, de eso sí estoy convencido. Eso explica el por qué yo acepte ser su apoderado, me sorprendió que ya está en otro nivel, otra dimensión, con otra mentalidad, no está como la gente lo veía antes, ya está más maduro, tiene una mentalidad de ser un toreo muy importante", señaló.
El Conde lamentó que el apoderamiento llegue en este momento en que el país está en vilo con el asunto de la pandemia y que las plazas estén paradas.
"Yo le he dicho que siga entrenando como si fuera a torear mañana. Es un chavo muy profesional, muy dedicado y eso ayuda mucho también. Para mí es una gran responsabilidad llevar la carrera de un torero de ese tamaño de dinastía, no es un torero común, no es fácil, pero yo creo que se pueden hacer cosas buenas con él, ya lo verán".
Y con su particular estilo remató una sentencia a todos aquellos aficionados que no han apreciado la clase de su nuevo poderdante:
"¿Quieren que surjan toreros de México?, pues ahí puede estar uno. Es tiempo de que valoren su esfuerzo y dedicación", finalizó.