La tarde de este domingo la pintoresca población de Jalpa, enclavada en los cañones de Zacatecas, fue el marco para la celebración de una novillada, en la que partieron plaza los espadas Carlos Montes, David Vizcaya, Alejandro López y Joselillo Olivares.

El joven hidrocalido Alejando López ha demostrado que asimila bien el toreo, se enfrentó al tercero de la tarde de nombre “Perdiguero” al cual recibió con verónicas alternando chicuelinas, quitó con zapopinas para después cubrir el segundo tercio acompañado de sus alternantes.

Realizó una faena bien estructurada, con la mano derecha corrió la mano en varias tandas con lucimiento y proyección a los tendidos, probó con el lado izquierdo, terminó su labor con vistosas manoletinas, mató con mucha decisión, poniendo el pecho por delante sepultando todo el acero,y como premio recibió las dos orejas.

Grata fue la presentación del novillero Joselillo Olivares, un muchacho que mostró lo esencial en esta difícil profesión, valor y carisma. “Si Dios” fue el que cerró plaza y con él, el rubio novillero se fue a los medios para, de rodillas, ejecutar dos largas más con voluntad que con técnica que le fueron muy coreadas. Con carencias pero con mucho corazón intentó torear con el capote, cubrió el segundo tercio exponiendo en todo momento, sobre todo al colocar el segundo par en el terreno de los adentros.

Con la franela también buscó el toreo bueno, lamentablemente se puso pesado con el acero por lo que solo saludo en el tercio. No cabe duda que a este chaval si le enseñan a torear puede llamar la atención.

El experimentado Carlos Montes lamentablemente pechó con el novillo menos potable; “Jalapeño”, que abrió plaza, fue muy débil y por ello Montes tuvo que abreviar. Sin embargo mostró voluntad en su quehacer llevándose una oreja en la espuerta.

El tapatío David Vizcaya anduvo a la deriva en todo momento, no encontró la distancia adecuada y falló con el acero, para retíranse en silencio.