Con profunda pena, hace unas horas el matador y juez de la Monumental Mérida, Adrian Flores, nos informó acerca del fallecimiento, el día de ayer, de don Carlos Abán, quien fuera guardaplaza del coso meridano durante más de seis décadas.

A lo largo de su trayectoria vio pasar por este coso a grandes figuras del toreo de todos los tiempos de Mexico y España, y en su haber como aficionado tenía muchas anécdotas que contar desde sus inicios como cuidador del albero meridano.

Fue una persona estimada en el medio taurino, y un grupo de amigos le organizaron un homenaje el pasado 2 de mayo, durante el mano a mano entre Zotoluco y Sebastián Castella. El diestro Eulalio le brindo el quinto toro del aquel festejo, en reconocimiento a su labor.

Le sobreviven su esposa Margarita y su hijo Enrique,  a los que desde aquí les enviamos nuestras condolencias. Descanse en paz.