Ofrecemos a continuación un recorrido por varios medios de comunicación en España, revisando sobre lo que la prensa pondera de la actuación del torero tlaxcalteca Sergio Flores ayer en Las Ventas de Madrid, donde tomó parte en la tradicional Corrida de la Hispanidad.

El Mundo (Zabala de la Serna).

"La plaza sin embargo no se enteró de lo mucho que tragó Sergio Flores con un tercero salpicado, hechurado y bello sólo por fuera, porque por dentro era una prenda retorcida: mirón y tardo. De los que se lo piensan escarbando con la cara entre las manos hasta que atacan. Y cuando atacaba se acostaba o hacía hilo con guasa a la salida de los muletazos. Seco valor sin aspavientos el de Flores, que además se inventó a izquierdas fases meritísimas. La caída de la espada enfrió unos ánimos que injustamente nunca se calentaron. No supo vender el mexicano tanto su verdad como Ureña.

"El último, más que feo, era directamente contrahecho. Una porquería sin nada que aportar. La mirada perdida en los focos. No valía ni para que Flores se arrimase con su castigado cuerpo como ya se había arrimado. La casta y la raza, como se dice ahora, corrieron de parte de los tres toreros".

La Razón (Patricia Navarro):

"El mexicano Sergio Flores tampoco tuvo un lote para lanzarse. Su primero, tercero de la tarde, sacó muchas complicaciones, reservón y que embestía a arreones sin igualar nunca el ritmo. Flores puso toda la carne en el asador y lo intentó con un sexto, que se movió, ya era noticia después de ver al quinto, y con cierto son por el izquierdo y ninguna clase por el derecho. Fue por ese pitón por donde más se le ensució al mexicano la esmerada faena".

El País (Rosa Jiménez Cano):

"El mexicano Sergio Flores, promesa en sus tiempos de novillero, acusó lo mucho que le han castigado los toros este último año. Estuvo por encima de la corrida, pero con algunas dudas y sin argumentos claros.

ABC (Rosario Pérez):

"El escarbador tercero se lo pensaba antes de ir con su picardía geniuda. Entregado desde la apertura genuflexa, Sergio Flores lo intentó con ahínco y esbozó unos meritorios zurdazos para rematar valeroso entre los pitones. Decisión del mexicano con el barato y resacoso `Licorero´, sin misiles de guapeza ni casta. Adiós, Madrid. Hasta 2014".