En perfectas condiciones y mostrando un buen estado de recuperación se encuentra en los corrales de la plaza “Armillita” el toro “Giraldo”, indultado el domingo pasado por el matador Arturo Macías durante la última corrida de la Temporada Taurina 2010 en Saltillo.

El bravo y noble ejemplar de la ganadería de Montecristo ha presentado una excelente evolución luego de que fuera operado el mismo domingo por la noche por el médico veterinario Bernardo Martínez Aguilar.

Como es costumbre, los toros indultados son sometidos a una rigurosa y exhaustiva labor de saneamiento y desinfección de las heridas provocadas por la puya y las banderillas utilizadas durante su lidia y, afortunadamente, con este ejemplar se realizó una oportuna labor de tratamiento postraumático.

“Después de que el toro fue devuelto a los corrales procedimos a anestesiarlo para luego hacer las curaciones que consisten en desinfectar perfectamente las heridas, sacar los arpones que se pudieran haber quedado enganchados en las carnes del toro”, confirmó el veterinario Martínez Aguilar.

Al ejemplar se le aplicó abundante suero estéril y fue medicado con gentamicina, penicilina y clorhexidina de larga protección para no volverlo a curar, puesto que son animales de difícil manejo.

“El toro está de muy buen ánimo, no tiene temperatura, no tiene inflamación, está comiendo muy bien y tomando agua, eso son síntomas de que se encuentra en perfecta evolución, gracias a que no tenía heridas muy profundas y a la oportuna intervención que se le hizo”, dijo el experto.

Se estima que en tres o cuatro días podrá ser devuelto al rancho La Luz y San Joaquín, de la ganadería de Montecristo, ubicada en Hueyotlipan, Tlaxcala, y se esperarán las indicaciones del ganadero Germán Mercado, propietario de este ejemplar.