Si existe una plaza en México que se le da bien a Sebastián Castella, sin pensarlo dos veces podría afirmarse que es la Monumental Monterrey, donde hoy el francés cortó tres orejas y fue aclamado por la afición.

El triunfo se basó en su depurada técnica, valor e intuición para ir tejiendo tres faenas que fueron diferentes y que mantuvieron la expectación de los poco más de 4 mil aficionados que asistieron a la plaza.

Para esos aficionados ese fue el verdadero regalo que les dio la empresa que anunció este singular mano a mano sin antecedentes previos con el nuevo matador Juan Pablo Sánchez, pues hubo la oportunidad de deleitarse con tres actuaciones del galo en una sola tarde.

Sánchez estrenó aquí esta tarde su alternativa en plazas mexicanas y lo hizo con el pie derecho, pues si bien no logró una mayor cosecha de trofeos, su paso por la Monumental no es del todo mala considerando que tuvo una muy buena aceptación del público en los buenos momentos que tuvo durante la lidia de sus ejemplares.

"El toro de 5 y el torero de 25", reza el refrán taurino y Juan Pablo apenas si está llegando a los 20... el tiempo dará la razón.

Castella es un torero que se cocina aparte. Su sobrado sentido de la distancia y el temple, aunado a su capacidad y variedad de capa y muleta lo colocan en un sitio de privilegio en el reducido pedestal de los que pelean por el "numero uno".

Reseñar las tres faenas, brillantes y lucidas de capa, por tersas veronicas y pintureros remates o los estoicos inicios de muleta, ya sea tomado del olivo aguantando en reducido espacio las embestidas del primero, o bien, clavado en los medios hilvanando los cambiados por la espalda al tercero de su lote, son de cierto modo como darle un "review" a la casetera de la memoria para recordar una vez más esos bellisimos momentos captados por la pupila de los espectadores.

"Idolatrado", "Deslumbrante" y "Excelencia", qué mejores nombres para los toros de Begoña, bien presentados y de buen juego por cierto, fueron los que lidió Castella en esta tarde de reencuentro  en Monterrey donde vuelve a triunfar en su tercer año consecutivo en las corridas del llamado Serial Internacional.

A su primero lo bordó por naturales que se fueron sucediendo a un ritmo delirante y que pese a no haber cortado las orejas e lanimo no decayó hasta hacerle salir al tercio y premiarle con el aplauso. 

Con su segundo emocionó al iniciar con el péndulo en los medios una faena vibrante coronada magistralmente con la espada para cortar su primera oreja y con su tercero el extasis provocó en la afición una entrega total premiada con las dos orejas.

La actuación de Juan Pablo Sánchez es de reconocerse. No todos los días un nuevo matador se presenta por primera vez ante el público en un mano a mano con una primera figura del toreo. Valiente y entregado, siempre mirando al frente con deseos de triunfo, salió el aguascalentense peleando por lo suyo. Y aunque el grito de ¡toro!, se escuchó en el tendido, Sánchez hizo caso omiso y con argumentos se plantó con voluntad, llevando bien toreado al sexto al que le cortó la oreja después de un bajonazo.

Para el domingo se anuncia la segunda actuación de Castella, quien compartirá cartel con Zotoluco y Arturo Saldivar, ante un encierro de Fernando de la Mora.