El picador de toros Víctor Ortega, hermano del matador Rafael, y miembro de la dinastía de toreros de Apizaco, será intervenido este marte por la mañana en el Hospital "La Concordia" de Orizaba por el doctor Ricardo Guzmán Aguilera, y deberá retirarse de los ruedos como consecuencia de esta delicada operación.

"Tengo adormecimiento de piernas y se me hizo una resonancia magnética para ver que no fuera algún reflejo del problema de columna que padezco también, producto de los golpes recibidos en mi profesión durante años anteriores", señaló el varilarguero.

Debido a este padecimiento, Victor Ortega, tendrá que ser sometido a anestesia general para ser intervenido. Una de estas hernias la padece desde hace cinco años, y la otra hace tres meses, misma que detectó cuando fue a una tienta con el maestro José Tomás, y sintió un fuerte dolor en el escroto mientras estaba realizando labores de campo.

Tras una serie de estudios reciente, el médico que le atiende encontró que esta muy avanzado el problema por lo que es necesario ya intervenirlo, lo que le impedirá seguir picando.

"Ha sido una decisión muy difícil porque mi vida ha estado dentro del toro y ahora ya no podré ejercer mi profesión. Sin embargo, lo primero es mi salud para poder trabajar y sacar adelante a mi familia", comentó Ortega.

Con 19 años de carrera como picador, Víctor esta básicamente con un pie en el retiro ya que esta incapacitado para seguir ejecutando la llamada suerte de varas, por lo que su baja como activo en la Unión Mexicana de Picadores y Banderilleros es inminente, como sucedió en el 2009 con el banderillero Fernando Grajales, que ahora colabora como gestor de la empresa Protamex, de Pedro Haces.