Oreja para Bruno, entre concierto de avisos
El único trofeo que se obtuvo en la novillada de hoy en Texcoco
Las mejores faenas durante la novillada en la plaza "Silverio Pérez" de Texcoco, las realizaron Bruno Aloi al cuarto y Eduardo Neyra al quinto, pero sus fallos con la espada los llevaron a escuchar tres y dos avisos, respectivamente. Paradójicamente, fue una gran estocada tras una faena de disposición, la que puso en manos del menor de los Aloi, la única oreja que se concedió a lo largo de un festejo que duró casi cuatro horas.
Por su parte, César Pacheco quien logró estupendos pasajes al torear por naturales, también escuchó recados del palco de la autoridad; mientras que el hispano Jorge Molina, poco pudo hacer en su debut en tierras mexicanas, pues los lotes que ambos enfrentaron dieron poco de sí, toda vez que el encierro integrado por dos novillos de Caparica y seis de Real de Saltillo, que dieron escaso juego.
Abrió el festejo Eduardo Neyra ante un novillo de Caparica de buen estilo pero medido de fuerza y que en el transcurso de la lidia se tornó mirón; sin embargo, le permitió lucimiento en una serie de navarras y más adelante en tandas de muletazos por ambos pitones, ejecutadas a media altura. Terminó por torearlo muy ajustado. Tras un pinchazo y una estocada, escuchó palmas.
Ante el quinto, de Real de Saltillo, Neyra aprovechó la larga embestida para arrancar los primeros olés en un variado quite. La faena subió de intensidad a partir de la segunda tanda de muletazos con la mano diestra. A pesar del vendaval entre el que toreó, consiguió realizar una faena con calidad y emotiva. La labor fue extensa y al alza. Concluyó de estocada desprendida, debió usar el descabello, saludó, luego que escuchó dos avisos.
César Pacheco, con el segundo de Caparica, que fue deslucido, se esforzó con el capote. Conectó con la afición al tocar con firmeza y correr la mano por el pitón izquierdo del novillo. Cuando tomó la muleta con la mano derecha su labor fue entre altibajos y cerró con fuerza. Una estocada entera y un golpe con el descabello pusieron fin a su labor. Palmas. Pacheco debió acosar al sexto novillo por diversos terrenos del ruedo para ir ligando los pases. Se esforzó el zacatecano por construir un trastero, en el cual, escuchó dos avisos.
El español Jorge Molina debutó en México con el novillo llamado "Honorable", número 41, con 402 kilos de peso, de la ganadería Real de Saltillo. No le fue sencillo acoplarse a la embestida de un ejemplar que buscaba el abrigo de las tablas. Lo intentó con vehemencia, con pocos resultados. No estuvo certero con la espada. Silencio tras aviso. Ante el séptimo ejemplar la historia se repitió ante la disposición del torero hispano.
Bruno Aloi, con el cuarto de Real de Saltillo, batalló con el complicado juego del astado que iba hacia el engaño a oleadas e intentó colarse a las primeras de cambio, entre el viento que le flameaba la muleta. Se le agradece el oficio para estar siempre en el sitio y pasárselo muy cerca a pesar del peligro sordo. Se entregó en la estocada pero, no fue suficiente para hacer doblar a su enemigo. Se tiró a matar en varias ocasiones y escuchó tres avisos.
Con el octavo, la emoción se generó hasta que Aloi se plantó en la boca de riego para realizar una temerario cambiado por la espalda, seguido de doblones, aunque poco duró el gusto ya que el astado siempre estuvo a la defensiva, tirando derrotes Bruno no se conformó y le siguió robando meritorios pases uno a uno. Una gran estocada puso fin a su actuación y cortó una oreja de gran valía.
Ficha
Texcoco, Edo. de Méx.- Plaza "Silverio Pérez". Novillada de Feria. Un cuarto de entrada, en tarde soleada y con viento. Dos novillos de Caparica (1o. y 2o.) y seis de Real de Saltillo, que cumplieron en presencia y de escaso juego, con excepción del 5o. que resultó manejable. Pesos: 364, 353, 402, 443, 438, 403, 425 y 444 kilos. Eduardo Neyra (negro y plata): Palmas y ovación tras dos avisos. César Pacheco (grana y oro). Palmas y palmas tras dos avisos. Jorge Molina (azul marino y oro): Silencio tras aviso y silencio tras dos avisos. Bruno Aloi (salmón y oro): Silencio tras tres avisos y oreja.