La empresa Feria Toro, que encabeza José Luis Alatorre, ha finalizado una productiva temporada compuesta por 42 eventos taurinos, es decir un cuarenta por ciento más en relación con el año 2022 que se organizaron 30 festejos, lo que se traduce en un positivo balance para concluir el presente año.

Los números son significativos si se toma en cuenta el ya de por sí complicado panorama de la Fiesta en México, motivo por el cual resulta un esfuerzo loable, si se suman factores como la situación mermada situación económica y, sobre todo, los constantes ataques antitaurinos a los que se hicieron frente.

Destacó la organización de Ferias en plazas de primera categoría, caso de Pachuca, Tlaxcala, San Miguel de Allende y Huamantla, así como otros cosos donde se promovió la Fiesta como en el caso de Chilcuautla, Mangas, Pachuquilla, Apan y San Juan del Río, entre algunas otras.

Uno de los momentos estelares resultó, sin duda, la tarde del pasado 16 de octubre en Pachuca, cuando se logró un lleno de agotado el boletaje como hacía muchos años no ocurría en el coso de Hidalgo. Caso aparte resulta la organización de las novilladas puesto que, en la mayoría de los casos se apuesta a sabiendas de las consabidas pérdidas económicas.

Los momentos de opacidad se registraron en las plazas de Puebla y Teziutlán, donde a pesar de contar con los permisos correspondientes para su celebración, se atravesaron los arteros juicios de amparo que derivaron en suspensiones promovidas por entidades supuestamente animalistas que en nada abonan al entorno.

Para concluir el año, la empresa organizó el encierro de Huamantla, en evocación a su similar de Pamplona, una actividad que resultó todo un éxito por la seriedad y seguridad como parte de su estructura, lo que se espera se convierta en una cita tradicional de esta región, al ser el único evento de este tipo en nuestro país.