La dinastía San Román sigue creciendo. Este lunes 13 debutaron como amadores los hermanos Nicolás y Patricio San Román, quienes serán en un futuro no muy lejano los primeros rejoneadores de la dinastía queretana. El primero de ellos, Nicolás, de 19 años y nacido el 14 de julio del 2004, acaba de comenzar la carrera de médico veterinario zootecnista, que compaginará con sus entrenamientos de rejoneo.

Desde hace tiempo es también jinete a la alta escuela y ha participado en concursos de adiestramiento en el Dressage Circuito Centro, de San Miguel de Allende.

"Estuve montando dos años y para mí fueron las bases de todo esto. Un día llegó mi tío Juan Carlos, matador de toros y nos dijo a Pato y a mí que si echábamos un becerro y sin saber nada le dijimos que sí y ahí se encendió la chispa".

Patricio, de 16 años, nacido el 29 de marzo del 2007, era hasta hace tiempo portero de fuerzas básicas de los Panzas Verdes de León, en el futbol profesional, pero una lesión en la rodilla derecha le impidió continuar en las canchas. Actualmente, acaba de ingresar a la preparatoria.

Juntos tienen una cuadra de 16 caballos, entre estos dos de Rodrigo Santos, otros de José Ignacio Corral Urquiza, que es quien los entrena, uno más del hierro de Caliente, así como unos potros de la casa, ya montados y toreando.

"En esta novillada del debut nos tocó torear a colleras y me he entendido muy bien con mi hermano Pato, fue muy bonito lo que logramos entre los dos. Nos hemos dividido muy bien los caballos, algunas veces lo ayudo a él y en otras él a mí, hemos hecho equipo para salir adelante en este venenito que nos dejaron nuestra dinastía"

"Todo esto de la tauromaquia empezó por mi abuelo El Queretano. Cuando íbamos al rancho montábamos para lo de adiestramiento y le daba gusto, siempre nos dio su apoyo. Y aunque toda la familia ha sido de toreros de a pie, nosotros quisimos darle un cambio. Cuando salió lo del primer festival, mi abuelo estuvo ahí explicándonos lo que se tenía qué hacer con cada caballo y el día de nuestro primer festival nos fue bien y al terminar, Nico y yo dijimos: "vamos a seguirle" y aquí estamos".

Ese primer evento fue circunstancial, pues era para apoyar a un joven que padecía cáncer y se hacía el festejo en su beneficio en La Venta, Hidalgo. Los hermanos aceptaron la invitación para salir de la rutina de siempre de los entrenamientos y los concursos y a partir de ahí se pusieron a entrenar con el carretón y algunas vacas.

Nicolás es el segundo y Patricio el tercer hijo, de cuatro, de la familia de Agustín San Román. Los otros son Sebastián, el mayor alejado del ambiente taurino, y Camila, la menor de 14 años y quien ya comienza a montar. Agustín, su padre, es primo hermano del matador Óscar, padre del actual matador Diego San Román. También es primo de Juan Carlos y de Ernesto, este último padre de la matadora Paola San Román.

"Un día, en una reunión familiar, mis tíos nos dijeron: "si todos en la familia somos de a pie, ¿de dónde les salió a ustedes ser rejoneadores?, y contestamos que era para darle un giro a la dinastía", comentó el menor de los hermanos.

Consideraron los hermanos que para haber su primera novillada formal el lunes pasado, se sintieron bien actuando a colleras.

"El novillo fue muy bueno y los caballos estuvieron muy bien. Yo estuve ahí medio complicado con un caballo, me caí con ese caballo y me lastimé la espalda, pero solo es un dolor muscular, pero en general me sentí bastante bien, contento y al final lo que queda de esto son experiencias, es ir agarrando poco a poco el son".

Agregó Patricio que este es el inicio de un largo camino en el que habrán de tomar la situación muy en serio, a partir de ahora, a la par que con sus estudios, debiendo entrenar toda la tarde de lunes a jueves y los fines de semana en el rancho, preparándose a conciencia frente a los animales, para poder llevar muy en alto el apellido de la dinastía San Román en donde se presenten.