Isaac Fonseca cortó tres orejas hoy en la final "Tres a Tres" de la Copa Chenel, celebrada en la localidad madrileña de Alalpardo, y de esta manera se ganó un puesto en la Gran Final que se realizará el domingo 18 de junio en la plaza de Colmenar Viejo, todavía con alternante por definir para un mano a mano entre los dos toreros más destacados de este importante certamen de promoción para matadores.
El moreliano tuvo la suerte de enfrentar el lote de mejores hechuras y prestaciones de un encierro compuesto por tres toros de Ana Romero, de encaste Santa Coloma, y tras más de Victoriano del Río, procedentes de Domecq, y no desaprovechó la oportunidad de mostrarse, ante un público receptivo con el que conecto desde que recibió al tercero con una larga cambiada de rodillas.
Tras un buen ramillete de verónicas, en las que intercaló chicuelinas, ejecutó un ajustado quite por saltilleras y gaoneras, siguiendo ese mismo hilo conductor de la variedad tan propia de su chispeante tauromaquia.
El armonioso cinqueño de pelo colorado, embistió con bravura y nobleza y se le arrancó de largo en el inicio de la faena, que fue con un péndulo, de rodilla, en el centro del redondel. A partir de ahí corrió la mano a placer en una faena bien estructurada, en la que lució en los redondos y diversos adornos, así como en los largos pases de pecho con los que abrochó las series, antes de terminar con unas ceñidas manoletinas, antes de colocar una estocada entera, en buen sitio, en la que se echó prácticamente encima de los pitones del gran toro de la divisa madrileña.
Con las dos orejas en las manos, y sabedor de que ya tenía un pie en la Gran Final, Fonseca no escatimó esfuerzo para sumar más trofeos a su cuenta personal, consciente de que en la Copa Chenel no sólo se contabilizan distintos aspectos que van generando una puntuación muy específica, sino que no deseaba dejar dudas de su ambición.
El sexto fue un toro reunido y bonito, el de trapío más característico de su encaste santacolomeño y aunque fue un tanto flojo de salida, terminó yendo a más, otras de las cualidades de esta estirpe, y embistió con fijeza a la muleta del torero mexicano, que le hizo una faena aseada, no tan estructurada o intensa, pero de aceptable acabado, antes de volver a dejar otra estocada eficaz, que le valió el corte de una oreja, que terminó de confirmar su pase a ese festejo donde está en disputa un puesto para torear en la plaza de Las Ventas de Madrid en la próxima Feria de Otoño.
El veterano Juan del Álamo, que llegó a esta fase del certamen con un palmarés de seis orejas en dos anteriores actuaciones, tuvo una actuación un tanto contrastante. Al primer toro de Ana Romero que abrió plaza, un ejemplar hondo y alto, le hizo una entonada faena, en la que echó mano de todos sus recursos y buen concepto del toreo, para tumbarle una oreja tras una estocada desprendida.
Pero con el sexto buscó el aplauso fácil y acabo por desvirtuar un interesante trasteo con otro de los toros de bueno juego de los del hierro de Victoriano del Río. El dato curioso fue que, para entrar a matar, el salmantino se paró arriba del estribo, con el toro en la raya de afuera, y de ahí se vino andando a paso un tanto ágil (no a la manera de Antonio Ferrera, que ya patentó "la estocada a larga distancia" y señaló un feo pinchazo que quizá le arrebató la posibilidad de haber cortado una segunda oreja para haber salido a hombros y aumentar su puntuación.
El segundo espada del cartel, el torero sevillano Borja Jiménez, también llegó a este festejo de Alalpardo por la misma vía que sus compañeros de cartel: gracias a su destacado desempeño en tardes anteriores, y si bien es cierto que, en determinados pasajes de su actuación hubo detalles muy toreros, el de Espartinas no redondeó ninguna de sus dos faenas, sobre todo porque no anda bien con la espada, algo que lamentaba su mentor, el maestro Juan Antonio Ruiz "Espartaco", que estaba en el callejón con gesto de desagrado.
Los naturales al primer toro de su lote, que fue manejable, o los lances rodilla en tierra al quinto, el que brindó menos juego de los de Victoriano del Río, dejaron constancia de su sentido estético del toreo, aunque en este toro se le notó un tanto presionado por alcanzar el triunfo y de mitad de faena hacia adelante amontonó demasiados pases ante un ejemplar que no tenía demasiado recorrido.
Al final del festejo, el público que acudió a la plaza, constituido por gente del pueblo, pero también por aficionados de la capital, salió contenta al ver la evolución de Isaac Fonseca, que, en toda esa zona de Madrid, goza de un magnífico cartel que, seguramente, buscará acrecentar el domingo 18 en Colmenar, que es el pueblo donde vive desde hace varios años.
Ficha Alalpardo (Madrid), España. "Final a Tres" de la Copa Chenel. Casi lleno, en tarde primaveral. Tres toros de Ana Romero, de encaste Domecq (1o., 2o. y 6o.) y tres de Victoriano del Río. (3o., 4o. y 5o., éste con el hierro de Toros de Cortés), bien presentados en su conjunto. Encastado e interesante, el 1o. Manejable, sin fondo, el 2o. Bravo y con clase, el 3o. Noble y con calidad, el 4o. Manejable, sin recorrido, el 5o. Noble, a más, el 6o. Juan del Álamo (blanco y plata): Oreja y ovación tras petición. Borja Jiménez (verde manzana y oro): Ovación y ovación tras aviso. Isaac Fonseca (grana y oro): Dos orejas y oreja. Incidencias: Al finalizar el paseíllo se interpretó el himno de España. El cartel de la gran final se definirá en cuanto se haga la computación total después del festejo celebrado el día de hoy, y para esa fecha se lidiarán toros de Zacarías Moreno, Montealto y Palha.