A menos de 24 horas de haber sufrido este percance, se encuentra estable en el área de terapia intensiva de la Clínica Guadalupe, donde el equipo del doctor David Martínez, jefe de los servicios médicos de la capital hidrocálida, lo intervino en una operación que duró unas cuatro horas y media.

En una entrevista concedida a Adrián Sánchez, de Tauronota, el doctor comentó que se trata de una cornada de tres trayectorias, localizada en la parte postrero lateral del muslo derecho de José de Jesús Medina, conocido entres sus compañeros como "El Chiquilín". La primera trayectoria es hacia arriba, pero no penetró el abdomen; la segunda, hacia la región de la rodilla y, la más peligrosa, la que le atravesó el muslo, prácticamente de lado a lado, hasta la zona antero interna de dicho muslo.

Dicha trayectoria, que es la más extensa, lesionó los vasos femorales profundos, tanto la arteria como la vena femorales, mismas que fueron ligadas. De hecho, hubo necesidad de extraer una pequeña porción de la vena del lado izquierdo para hacer un "parche".

El herido llegó a la enfermería de la plaza "San Marcos" con un sangrado abundante y la clave en su atención fue haberle taponado de inmediato la herida, con el puño cerrado, lo que ayudó a cohibir el sangrado, que era muy profuso. Una vez estabilizado, fue trasladado a la clínica para se operado.

Serán críticas las primeras 72 horas a partir del momento en que se produjo la cornada, a la espera de que no surjan complicaciones, ya que este percance es de los que, según los médicos, ponen en riesgo la vida.

Cabe explicar que el novillo remató en la puerta de toriles antes de que todo estuviera listo para darle suelta al ruedo, donde había otro monosabio apenas anunciando el nombre del ejemplar sobre las rayas de tercio. Al vencer la puerta y salir por la manga de toriles, el novillo se dirigió hacia el callejón, cuando aún no estaban abierta de par en par la puerta de acceso al ruedo, y fue ahí que provocó una gran confusión y en su carrera se topó, lamentablemente, con Jesús y le pegó la fuerte cornada.