"Fue una tarde con sensaciones muy positivas. Me tocó un novillo que no fue fácil, fue agradecido y terminó haciéndolo bien. Había que estar bien con él y creo que así estuve, con mucha actitud, ganas e ilusión todo el tiempo y pude tener una buena actuación".
Lamentó que se emborrone esa buena actuación con la espada y no pudo cortar nada, llevándose solo una ovación cálida de la gente de Francia.
Dijo que en todo este tiempo que ha estado preparándose en el campo bravo español se ha sentido pleno y muy satisfecho.
"Mi experiencia en este tiempo que he estado por acá ha sido muy buena la verdad. Gracias a Dios he tenido la oportunidad de crecer mucho como persona y como torero. Dios me ha dado esta oportunidad que es única y que creo que la he podido aprovechar; en su mayoría he tenido oportunidad de debutar de luces y de hacer mucho campo".
Comentó que en sus primeras novilladas que toreó obtuvo resultados triunfales, con excepción del domingo en Francia, con puertas grandes en ellas y con las ganas de ir a más y aprovechar la oportunidad que le da Dios, su familia y su profesión.
"En este tiempo me he podido dar cuenta que, si te si te esfuerzas, si vives y te entregas a ello te da recompensas satisfactorias", señaló.
Cristóbal también repasó un poco las que han sido sus mejores faenas que ha realizado.
"He tenido la suerte que me toquen buenos novillos aquí en España y yo resaltaría como una de mis mejores faenas la que le hice en Villa Vieja de Yeltes a un novillo de don Francisco Galache a mi primer novillo de asa tarde.
Lo que es el torear me sentí muy a gusto, pude sentir mi toreo bueno, clásico y bonito, además con detalles de valía, de valentía y arrojo, que hoy en día es muy importante mostrar las ganas de querer ser, pero toreando bien y bonito", dijo.
Por otra parte, recordó también los mejores novillos que le ha tocado lidiar, entre estos los dos de Marco Núñez, el día de su debut con picadores el pasado 15 de agosto en Zorita, Cáceres.
"Fueron dos novillos de nota muy alta, también uno que me tocó en Candeleda, de la ganadería de Juan García Rivera que fue bravo, exigente, agradecido y muy bueno con el que pude estar a gran altura y le corté el rabo".
Una vez terminada su temporada española el novillero regresará a México en los próximos días, donde espera seguir entrenando en el campo.
"Voy dispuesto a seguirme preparando con gran ilusión en la medida de lo posible y con el apoyo de la gente intentaré hacer campo y prepararme para lo que viene y el próximo año, si Dios quiere, regresar aquí a España para hacer otra campaña como novillero sin picadores", finalizó.