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Tarik cuaja dos faenas de figura

Domingo, 04 Sep 2022    Zacatecas, Zac.    Juan Antonio de Labra | Enviado          
Cortó cuatro orejas tras una impactante actuación
Tarik Othón deslumbró al público que acudió hoy a los toros en la Monumental de Zacatecas, adonde llegó como un auténtico desconocido y salió a hombros en medio del entusiasmo colectivo, tras cuajar dos faenas de figura del toreo, que hacen ver la gran proyección que atesora.

Y como si de un torero maduro y con mucha experiencia se tratase, el joven queretano de apenas 19 años, demostró que lo suyo va muy en serio no sólo por su buena monta y su capacidad expresiva, sino porque su toreo mantiene un extraordinario equilibrio entre la verdad y la espectacularidad.

Si a eso añadimos el carisma que atesora, así como el desparpajo con el que se desenvuelve, y la cuadra que tiene, pues entonces estamos ante un torero con unas cualidades que hoy día lo convierten en uno de los rejoneadores más interesantes de la baraja mexicana.

Prueba de ello fue la tarde de toros tan completa que ofreció en la corrida de rejones celebrada en Zacatecas, donde enfrentó un primer toro de Puerta Grande que tenía transmisión, y al que toreó con temple de principio a fin, haciendo gala de recursos y una facilidad nata para encontrar los terrenos, uno de los puntos finos en el toreo a caballo.

Clavó banderillas con entrega, siempre haciendo bien las cosas, procurando dar tiempo y distancia a los toros, y haciendo lucir a varios de los caballazos de una cuadra redonda que está muy puesta, gracias, hay que decirlo, a las enseñanzas de su maestro, el gran rejoneador Vitor Ribeiro, que se nota está motivado con la rápida evolución de su pupilo.

El rejón de muerte con el que remató la faena a su primer toro, jugado en tercer lugar, fue el más digno colofón a una faena redonda, en la que hubo ceñimiento en los embroques, sobre los lomos del bayo "Ribeiro" o del tordo "Enzo", lusitanos toreros de gran nivel, como también los caballos que utilizó en la lidia del sexto toro.

Porque no conforme con la Puerta Grande que ya tenía abierta, dejó de rayar a la altura de las circunstancias, consciente de que estaba en un cartel de rejoneadores con alternativa, y donde nunca se percibió, siquiera, que él apenas es un rejoneador “amador”, al que en un futuro no lejano le cederán la muerte del primer de toro de una corrida el día que reciba el doctorado como matador de toros a caballo.

El último toro de la entretenida y triunfal corrida, que pertenecía al hierro de Guadiana, Tarik volvió a mostrar su capacidad prácticamente desde que clavó los rejones de castigo, ante un público que lo estaba esperando y quizá quería constatar si lo del tercero no había sido obra de la casualidad.

Y resulta que no fue así. Por el contrario, ya que ratificó sus buenas maneras y formó otro gran alboroto, sobre todo montando a "Aquiles", un bayo con el que ejecutó unos quiebros sensacionales, en los mismos medios. Y desde que se marchaba hacia atrás haciendo gala de dominio sobre su caballo, hasta que venía en un galope corto y concentrado, hasta quebrar en un terreno comprometido, todo eso era belleza y expresión torera que hizo estallar de emoción al público.

Los adornos finales con las banderillas cortas, que clavó en un palmo de terreno con seguridad, y otro rejón de muerte fulminante, colocado después de un pinchazo previo, obligaron al juez de plaza Manuel Esparza a conceder la segunda oreja tras la fuerte petición popular que lo vitoreó en la vuelta al ruedo y, más tarde, en la salida a hombros.

Y así salió triunfante de la plaza Tarik, tras esta demostración de torería en una noche especial en la que aquí, en Zacatecas, conquistó un triunfo de esos que dejan huella.

Con la misma frescura, y a sus 25 años, Fauro Aloi hizo un toreo tan clásico como elegante ante dos toros de distinta condición. El primero, perteneciente al hierro de Guadiana, que era bajo, armonioso y capacho de cornamenta, que embistió con bravura y humillación.

Así que también se afanó en hacer las cosas con ortodoxia y un estilo sereno, en el que también enseñó que tiene muy buenas condiciones para avanzar en esta difícil profesión, a la que urge que los rejoneadores mexicanos aumenten su nivel para rivalizar con las figuras que ya están por volver a ruedos del país.

Esa primera faena del hijo de Giovanni había tenido calidad y todo apuntaba a que ya le tenía cortada una oreja de ley al toro, por todo lo bueno que había hecho. Sin embargo, tres intentos fallidos de pega, del valiente y pundonoroso Hiram Gallardo, echaron por tierra las expectativas de Fauro cuando intentó matar a un toro desfondado por el fragor de esos encontronazos con los forcados. Y vinieron los pinchazos con el rejón de muerte que echaron por tierra lo que había conseguido.

En el quinto, de Puerta Grande, Fauro volvió a enseñar sus buenas credenciales y trató de apurar el desarrollo de las cosas, sabedor de que Tarik ya se le había ido por delante, y en distintos pasajes de la lidia toreó con temple y calidad cuando sacó a torear a "Favorito".  Y así discurrió la faena, con al público a favor, deseoso de alentarlo hasta que se repitieron los fallos con al rejón de muerte, en una corrida donde era importante aprovechar la oportunidad para salir triunfador.

De cualquier manera, ahí queda su buen concepto del toreo y esas ganas de agradar, amén de la tarea de perfeccionar su técnica para matar, par no dejar escapar los triunfos.

El primer espada del cartel, el rejoneador yucateco Cuauhtémoc Ayala, hizo un esfuerzo por agradar desde que enfrentó al corpulento y hondo toro que abrió el festejo, un ejemplar de Julio Delgado que salió con una conducta de haber estado mucho tiempo en los corrales, y no fue fácil clavarle los rejones de castigo porque embestía cruzado y se ponía por delante, conducta que siempre implica un riesgo añadido para los rejoneadores.

Haciendo un esfuerzo que el público supo valorar, Ayala le buscó las vueltas con "Líder" y "Peralta" para clavarle las banderillas, y como se dio a pinchar varias veces luego decidió echar pie a tierra para dar muerte al toro, labor que no fue fácil.

El cuarto, un toro de buenas hechuras de Puerta Grande, le permitió andar con más desahogo sobre el ruedo de la Monumental, y de salida toreó con "Astroboy" para más tarde sacar a "Encanto" y rematar la faena con la yegua "Muleta", la única hembra de todos los ejemplares que hoy salieron a torear. Y le echó arrojo al clavar un par de banderillas a dos manos, en los medios, lo que representa mayor mérito, antes de volver a pinchar en hueso a la hora de matar a un toro que había sufrido una lesión en el ojo derecho, misma que había minado un tanto su desempeño.

Las pegas de los Forcados de Mazatlán y los Forcados Amadores de México fueron muy intensas, y algunas de ellas las consumaron al primer intento, como ocurrió en el tercer toro, cuando Carmona templó muy bien la embestida o la que hizo Said Mora al quinto.

Otro momento emotivo fue la despedida de Adán Flores, contador de profesión, que a sus 48 años decidió dejar la noble actividad en el grupo de Mazatlán, y sus compañeros le dieron una emocionada vuelta al ruedo a hombros, luego de haberse despojado de la chaquetilla en los medios, hecho que simbolizaba su última tarde como forcado.

La feria se desarrolla con normalidad, aunque se espera que aumente la afluencia del público, porque hoy, de haber habido más gente en los tendidos, seguramente el triunfazo de Tarik hubiese tenido, ahí, en la plaza, una mayor resonancia, porque el impacto provocado por el queretano ya quedó ahí, para los anales de este coso donde cortar orejas, en los tiempos recientes, no ha sido cosa fácil.

Ahora a esperar unos días sin actividad en la Monumental, donde volverá a haber toros entre el jueves 8, día de la Virgen del Patrocinio, patrona de Zacatecas, y el domingo 11 de septiembre, cuando se llevará a cabo un ramillete consecutivo de corridas de toros, para las que hay carteles interesantes.

Ficha
Zacatecas, Zac.- Plata Monumental. Segundo festejo de feria. Corrida de rejones. Menos de un cuarto de entrada, en tarde agradable. Toros de Puerta Grande (3o., 4o. y 5o.), dos de Guadiana (2o. y 6o.), desiguales en presentación y juego, de los que destacaron 2o., 3o. y 6o. Pesos: 546, 544, 455, 450, 450 y 461 kilos. Cuauhtémoc Ayala: Vuelta en su lote. Fauro Aloi: Ovación en su lote. Tarik Othón: Dos orejas y dos orejas. Incidencias: Josué Alan Sandoval de los Forcados de Mazatlán, realizó la pega 1o. Hiram Gallardo, del grupo de Amadores de México tuvo tres intentos fallidos, mientras que Carmona pegó al 1o. intento. Adam Flores se despidió. Grupo mixto. Hiram pegó al 5o. al segundo intento. Said Lugo realizó una buena pega al primer intento. Al final de la corrida Tarik se llevó el trofeo del "Rejón de Plata" que se encontraba en disputa, al igual que la "Forca de Plata" distinción que compartieron los Forcados Amadores de México en conjunto con los Forcados de Mazatlán, quienes en un noble gesto cedieron el reconocimiento a Ruby, una niña, gran aficionada, con capacidades especiales.


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