El picador Eduardo Rivera resultó con fractura de los huesos metacarpianos de la mano izquierda, durante su actuación del domingo pasado en la plaza de toros "Nuevo Toreo" de Tijuana, donde toreó bajo la órdenes del matador Juan Fernando.

El percance se produjo durante un tumbo en el segundo toro de la tarde, perteneciente, como toda la corrida, a la ganadería de Fernando de la Mora. Al caer, el varilarguero potosino sufrió la fractura de los metacarpianos de los dedos índice, anular y medio de la mano derecha.

"Llegué a San Luis muy temprano y me vine a la Beneficencia Española a consultar con el doctor Nereo Anaya Méndez, jefe de los servicios médicos de la plaza de toros El Paseo. En la revisión se detectaron las tres fracturas, pero como tengo la mano muy inflamada se determinó por lo pronto darme antiinflamatorios y medicamento para el dolor y ya el jueves se decidirá qué procede", dijo Lalo Rivera.

Será hasta entonces cuando los médicos determinarán si se le realiza una cirugía de la mano para insertar clavos, o bien si con la alineación de las fracturas de los huesos, que no están desplazadas y el yeso es suficiente.

"Cuando el toro me derribó sentí que algo me pegó en la mano, pero no sé si fue el estribo o me alcanzó a pegar el toro con la pala del pitón, pero cuando me levanté tenía la mano doblada y al estirarla tronaron los dedos por dentro. Seguramente, esta fractura me tendrá fuera de los ruedos por un lapso de unos dos o tres meses", expresó Rivera con resignación.