César Pacheco corta oreja en la "San Marcos"
Y se convirtió en el triunfador del serial novilleril de este año
La temporada de novilladas de la plaza "San Marcos" llegó a su fin, siendo el coleta zacatecano, César Pacheco, el triunfador del mismo, luego de cortar la única oreja en la última novillada del ciclo, a lo largo de un festejo que tuvo diversos matices y momentos de mucho interés.
La inexperiencia de Pacheco le trajo como consecuencia dos momentos de apuro con el capote, fue el torero de plata, Aldo Navarro, quien puso orden en el ruedo, llevando a colocar el novillo al caballo, toreando como desde un principio se debió de hacer a un ejemplar alto y basto que sacó complicaciones cuando apareció en el ruedo.
Así que la faena de Pacheco tuvo un interés particular, por las condiciones poco favorables del de Santa Inés para el lucimiento, en principio de cuentas, el comienzo de rodillas del espada zacatecano apretando los machos desde un inicio, lastimosamente el novillo fue deslucido, y las embestidas eran a cuenta gotas, pero fue la persistencia lo que valió para el reconocimiento del público.
Hay estocadas que por sí solas merecen el corte de una oreja, por su ejecución y por la entrega, tal como la que hoy nos regaló Pacheco, quien fue prendido de fea manera cuando se olvidó por completo del cuerpo y se entregó en la suerte suprema, volcándose sobre el morrillo para sufrir una aparatosa voltereta.
Cuando las cosas se hacen de manera correcta, se dice que todos somos devotos del mismo santo, fue precisamente Alejandro Adame, quien ha mostrado de muy buena manera su expresión artística, tanto de capa como de muleta. Toreando muy asentado por verónicas y gustándose en el quite por navarras.
El novillo tenía transmisión y calidad, y el torero de casa supo aprovechar dicha condición, trazando muletazos largos y profundos. Alejandro se mostraba sonriente, faena breve que terminó con unas atropelladas bernadidas, que desmerecieron con la clase de lo que había hecho. Luego se tomó su tiempo para cuadrar al novillo, que finalmente terminó por pinchar en un par de ocasiones, echando por tierra la posibilidad de triunfar.
Juan Querencia mostró significativos avances en comparación con su anterior actuación. Se le percibió entregado y torero en el saludo capotero, que incluyó verónicas, chicuelinas y hasta una larga de rodillas. Dio inicio a su faena con doblones muy buenos, para dejar al novillo en los medios.
El de Santa Inés tenía nobleza pero carecía de fuerza, en ese sentido, Querencia supo tomar la medida para lograr una faena que mantuvo el interés del público, misma que, desafortunadamente, malogró con el acero. Destacó su buen concepto del toreo y la calidad que procura dar al terminado de sus muletazos.
Eduardo Neyra abrió plaza y ejecutó un quite combinado con chicuelinas, tafalleras y navarras. Luego brindó su actuación al respetable. Con las zapatillas plantadas en los medios, le cuajó un cambiado por la espalda, el novillo tendía a puntear al final del muletazo desluciendo el trasteo.
Por el pitón izquierdo el novillo no colaboró, por lo que Neyra le realizó un trasteo derechista, a un ejemplar que regateaba la embestida, que había que torearle de uno a uno, pues se había quedado agarrado a la arena. Voluntarioso y esforzado se mantuvo el torero de Durango en todo momento y causó una buena impresión por su valor y disposición.
César Fernández, el hijo de El Quitos, que reaparecía en esta plaza tras el debut en el que fue herido, se gustó toreando por verónicas, bonito ejemplar el de Santa Inés que tenía transmisión, pero que pronto se vino a menos, y fueron justamente las primeras dos tandas donde "Tío Bola" y Fernández, se compaginaron a la perfección, tal vez los olés más profundos de la tarde porque el torero franco-mexicano le puso emoción, bajo los acordes de la "Pelea de Gallos".
Luego el novillo reculó a tablas, la pelea de gallos se hizo presente al mismo tiempo que la sonrisa de Fernández, quien insistió en sacar al novillo que se refugió en tablas, donde finalmente le plantó cara, pero el novillo ya se había rajado, condición que, inexplicablemente le valió para ser premiado con vuelta al ruedo, no habiendo sido premiado con arrastre lento el novillo de Adame, que fue, sin lugar a duda, el mejor de toda la novillada.
De rodillas y en los medios, Daniel Prieto recibió a "Balita", quien tuvo que hurtar el cuerpo para salir librado del trance. Tuvo un segundo tercio voluntarioso, donde la afición le brindaba palmas de apoyo. El novillo se distraía con regularidad, aunado a que le faltaba movilidad.
Prieto, que tenía muchos partidarios en la plaza, tardó en tomarle la distancia, pero una vez que lo consiguió le cuajó algunas tandas por el derecho, el ánimo del torero nunca se vino a menos, una faena donde al final de cuentas el novillero estuvo por encima de las condiciones del novillo, pero aún tiene mucho trabajo por realizar para ganar confianza y depurar su técnica.
Destacamos el juego de brazos con el capote de Emiliano Robledo, así como el quite por saltilleras, porque aunque el torero se mostró con mucha disposición, la verdad es que el novillo no se movió y esos impidió ver su desempeño con más interés.
Así concluyó esta campaña que ha dejado muchas cosas buenas, importantes entradas de público y muchos niños y familias en el tendido. La plaza "San Marcos", desde hace varios años, sigue siendo ese bastión de la novillería de México.
Ficha
Aguascalientes, Ags. Plaza San Marcos. Novillada de triunfadores. Dos tercios de entrada en tarde-noche calurosa. Siete novillos de Santa Inés, bien presentados y de juego variado, de los que destacó el 2do. por su clase. El 7o. fue premiado con una vuelta al ruedo excesiva. Pesos: 410, 423, 440, 450, 424, 404 y 424 kilos. Eduardo Neyra (negro y plata): Ovación. Alejandro Adame (fucsia y oro): Vuelta. Juan Querencia (blanco y plata): Palmas tras aviso. Cesar Pacheco (grana y oro): Oreja. Daniel Prieto (negro y pasamanería negro): Palmas. Emiliano Robledo (azul marino y oro) : Palmas. César Fernández (azul eléctrico y oro): Palmas tras aviso. Incidencias: El aspirante a banderillero José Manuel López "El Chato" saludó dos ovaciones tras buenos pares al 2o., mientras que Jonathan Padro hizo lo propio en el 7o. Al final del festejo, Pacheco fue conducido a la Clínica Guadalupe para ser valorado por el servicio médico de la plaza.
Aguascalientes, Ags. Plaza San Marcos. Novillada de triunfadores. Dos tercios de entrada en tarde-noche calurosa. Siete novillos de Santa Inés, bien presentados y de juego variado, de los que destacó el 2do. por su clase. El 7o. fue premiado con una vuelta al ruedo excesiva. Pesos: 410, 423, 440, 450, 424, 404 y 424 kilos. Eduardo Neyra (negro y plata): Ovación. Alejandro Adame (fucsia y oro): Vuelta. Juan Querencia (blanco y plata): Palmas tras aviso. Cesar Pacheco (grana y oro): Oreja. Daniel Prieto (negro y pasamanería negro): Palmas. Emiliano Robledo (azul marino y oro) : Palmas. César Fernández (azul eléctrico y oro): Palmas tras aviso. Incidencias: El aspirante a banderillero José Manuel López "El Chato" saludó dos ovaciones tras buenos pares al 2o., mientras que Jonathan Padro hizo lo propio en el 7o. Al final del festejo, Pacheco fue conducido a la Clínica Guadalupe para ser valorado por el servicio médico de la plaza.
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