En estas horas de luto, el recuerdo de Julio queda patente a través de su alegría, la misma que lo llevó a fundar una divisa en compañía de su hermano Manuel y el yerno de éste, el apoderado de Sergio Flores, Roberto Viezcas, y que hoy día ya ha visto frutos gracias a la dedicación y empeño de un trabajo hecho por los tres con tanto cariño en el precioso rancho "El Rocío", del Estado de México.

Ahí fortaleció su afición taurina en las jornadas camperas que disfrutaba tanto, y donde aprendió mucho al lado de toreros como Arturo Saldívar y, sobre todo, Sergio Flores, que vive en el rancho y tenía una estrecha relación con Julio.

Amigo de sus amigos, hombre de palabra y generoso, se marcha también como consecuencia de Covid en una jornada negra para la Fiesta Brava en México. Nuevamente, nuestro pésame, desde estas líneas, para toda su familia en estas horas tristes. Descanse en paz tan entrañable persona.