El confinamiento ocasionado por la pandemia después de todo no ha sido tan malo como parece para la fiesta de los toros en México, pues por una parte ha servido para que, en el confinamiento, muchos toreros estén afinando su quehacer taurino en el campo, lejos de los lugares de contagio y para que los ganaderos vean sus reses, ya sea en las tientas o en los festejos que empiezan a multiplicarse por estos días. 

Ha servido además para que se generen nuevas ideas, que es lo que se busca para la “nueva realidad”, como la que han tenido el rejoneador potosino Jorge Hernández Gárate y el forcado mazatleco, René Tirado, de crear en forma la llamada Fiesta del Forcado, la cual tuvo lugar el sábado pasado en la ganadería del primero, en San Luis Potosí. 

"Es la primera vez que se hace y es como una forma de rendirle un homenaje al forcado. Ésta, a diferencia del evento que tuvimos hace dos o tres meses en el Foro del Rejoneador que giró en torno a ellos y, que, si bien somos un complemento de ellos, la nuestra giró alrededor del forcado", dijo Tirado. 

El festejo fue prácticamente familiar, guardándose todas las medidas sanitarias del gel antibacterial, el cubrebocas y la sana distancia. 

"Se relizó en la ganadería de Jorge Hernández y participaron prácticamente todos los grupos, de todas las épocas, se les hizo un reconocimiento y estuvo todo muy padre. Se lidiaron tres toros y tomaron parte Jorge Hernández, el portugués Víctor Ribeiro, Giovanni y Fauro Aloi, así como Diego Louceiro, y además se sacaron dos vacas para hacer diferentes tipos de pegas y una becerra, para las personas que nos acompañaron pudieran torear", explicó el forcado. 

Se rindió un homenaje a Pedro Louceiro II, fallecido hace un año y, en su honor, los forcados instituyeron la Presea "Pedro Louceiro", que se entregó a destacados miembros que fueron reconocidos en este evento tan especial.

Por su parte Hernández Gárate comentó que este evento es una de las cosas buenas que les está dejando esta pandemia y que la idea es celebrarlo cada año, cuando se pueda, con público.  

"Me siento muy contento de que haya sido en mi casa y de que fuera una idea de René y mía de poderlo hacer y de que se institucionalice, que sea cada año y con ello buscar un poquito eso, que se le dé su lugar al rejoneador y al forcado y cuando se normalice esto, estar al pie del cañón", agregó. 

Hernández Gárate, nieto, hijo y sobrino de rejoneadores, manifestó que es también muy importante que haya sido en San Luis, tierra del rejoneo, donde se celebró este evento que para ellos es muy significativo.

"Era importante que esta Fiesta del Forcado fuera aquí en San Luis y en casa de un rejoneador. No hubiera estado bien hacerla en una casa ganadera que no tiene nada que ver con el rejoneo. Se juntaron todos los ingredientes para poder hacer una fiesta, donde se debía hacer y con el ingrediente extra de contar con un rejoneador portugués como Víctor, que le dio ese toquecito de donde provienen los orígenes de nuestro espectáculo", finalizó.