El congreso del estado de Tlaxcala aprobó el proyecto con el cual se reconocen las 100 ganaderías de bravo, registradas de manera oficial ante la Asociación Nacional de Criadores de Toros de Lidia, como espacios y reservas eminentemente ecológicas que además contribuyen al desarrollo económico y cultural de la región.

Con 21 votos a favor por parte de las fracciones parlamentarias, se ratificó a la Fiesta y su vertiente ecológica como Patrimonio Cultural Inmaterial, los cuales representan un importante detonador económico del que dependen alrededor de 200 familias tanto de manera directa como indirecta. 

Autoridades y representantes del gremio taurino local elogiaron dicha determinación, pues desde su perspectiva, indica una clara muestra del trabajo conjunto entre las instancias y fortalece la tauromaquia como parte de la identidad cultural de los pobladores. 

Por su parte, los ganaderos Marco Antonio González Villa y Antonio de Haro, expresaron su beneplácito pues esto les permitirá acceder a mayores recursos a nivel nacional e internacional que les permitan la adecuada preservación de los terrenos en cuestión, en conjunto con la permanente promoción cultural que deriva de lo anterior.