A las pocas horas de haberse conocido la cancelación de ferias de gran importancia, así como de diversos festejos taurinos en varias regiones de España y Francia, la incertidumbre que impera en este momento es lo que más preocupa al sector taurino, consciente de la problemática que entraña reprogramar sus ferias.
Además de Valencia, Castellón y Arles, y el comienzo de la temporada en Las Ventas de Madrid, se han suspendido festejos en Arnedo, Morón de la Frontera, Murcia, Granada, Fitero... y hasta localidades portuguesas como Santarem y Almeirim, han suspendido toda actividad taurina de la misma manera en que el Museo Taurino de Madrid y la Escuela Taurina "José Cubero" cerraron sus puertas.
La alarma es máxima por las pérdidas que el coronavirus va a ocasionar y por eso la Fundación El Toro de Madrid, que encabeza el ganadero Victorino Martín, buscarán una reunión urgente con el Ministro de Cultura de España, José Manuel Rodríguez, para revisar el caso y ver qué medidas se pueden aplicar que ayuden a contrarrestar este grave problema para la Fiesta.
En Sevilla no se ha puesto en duda que la Semana Santa –tan fervorosa y concurrida de toda la vida– y también la feria –incluidos los toros en la Maestranza– se van a llegar a cabo, según las declaraciones hechas por el alcalde Juan Espadas al ABC de Sevilla:
"Sería por mi parte irresponsable especular con la Semana Santa y la Feria y no voy a hacerlo. No voy a poner dudas sobre su celebración ahora mismo. Ahora mismo sí se van a celebrar, sin lugar a dudas". Sin embargo, Espadas prefiere no ser concluyente y deja la puerta abierta a próximos acontecimientos: "Vienen dos semanas que serán decisivas. Habrá dos factores, ver cómo evoluciona el tema en Madrid después de esta decisión de contención y, en segundo lugar, cómo evolucionan también los casos en Sevilla, que en este momento están en unos parámetros razonablemente normales". El alcalde cree que "después de estas dos semanas, el Ministerio se replanteará, si la cosa no sigue avanzando, volver al grado anterior y, si se mantiene ahí, ya se conocerán las decisiones", ha declarado al diario ABC sevillano, 45 días antes del arranque de la feria.
De cualquier manera, la preocupación es máxima por las graves pérdidas económicas que ocasionaría una suspensión de toda actividad en Sevilla. Y mientras unos toreros han tenido que cancelar hoteles, aviones y viajes, para quedarse en casa, otros, como Morante de la Puebla, han decidido salir a fumigar los tendidos de la plaza de Jerez, donde tiene previsto torear un mano a mano con Julián López "El Juli" a comienzos de mayo, regalando una curiosa imagen de un absurdo proceder.