Andrés Roca Rey dio otro importante golpe de atención en la Monumental de Tijuana, donde el día de hoy cortó dos orejas a lo largo de un festejo en el que Joselito Adame obtuvo un apéndice y Arturo Macías saludó una ovación y más tarde se fue de vacío.
Y es que desde que abrió el capote, el peruano conectó con el público; recibió muy quieto y sin reponer terreno a su primero, al que lanceó al torear por verónicas; una vez picado el toro el peruano se planto en los medios de la Monumental y ejecutó un quite por gaoneras que fueron una explosión para los tendidos.
Con la muleta armó un escándalo cuando se arrancó el de Santa Fe del Campo de largo y el peruano en los medios lo recibió con un péndulo, quieto como una vela, inmóvil una y otra vez repitió en péndulo y remató con sentido pase de pecho. Ya en los medios le corrió la mano por ambos lados, sobre todo por el pitón derecho que fue por donde el toro acudía con más calidad y bravura.
El astado fue bravo y acometía con prontitud al engaño del peruano que lo obligó y lo sometió con la mano muy baja. Intentó agradar al torear al natural pero el toro no tenía el mismo fondo. Mató de una entera en buen sitio y se le premió con las dos orejas.
Serio fue el toro que cerró la temporada en Tijuana, el astado mas hecho y con edad de la corrida. Para colmo de males, burriciego, un toro que daba ninguna esperanza de hacerle faena por todas las complejidades que representó. Pero las cosas cambiaron cuando Roca Rey tomó la muleta, se le puso cerca y empezó a someterlo por ambos pitones, haciendo lo imposible posible. Fue una lástima que la faena no lo vio el grueso del público y todo quedó en palmas para el torero.
Joselito Adame le cortó un apéndice a su segundo. Lo recibió con lances a pies juntos gustándose al torear por verónicas. Con la muleta el toro fue incierto y el torero de Aguascalientes lo fue sometiendo poco a poco, jamás perdió la paciencia y después de media faena empezó el temple y los muletazos largos, de buena factura.
Ya sometido el toro, fue una faena de detalles, dosantinas y derechazos en redondo fueron el colofón de una faena de calidad. Mató después de un pinchazo y el público lo premio con una oreja protestada por cierto sector.
Con su primero, un toro manso al que Joselito le dio una lidia adecuada, anduvo a gusto con él pero sin lograr concretar con los tendidos. Pincho en varias ocasiones y se retiró con leves palmas.
Arturo Macías recibió con lances a la verónica al toro que abrió plaza; una vez que cumplió con la autoridad, inició la faena doblándose con el astado hasta llegar a los medios. Ya en la boca de riego de la Monumental de Playas, dio inicio a la faena toreando por el pitón derecho.
El toro tenía gran calidad en sus embestidas pero el torero no se acopló con él sino hasta el final de faena, donde logró dos tandas de buenos naturales. Media en buen sitio mandaron al destazadero al toro, y el público sacó al tercio al torero.
Con su segundo, Macías herido en su orgullo debido que Roca Rey había cortado dos orejas al corrido en tercer lugar, se fue a portagayola. Con la muleta todo quedó en esfuerzo y algunos muletazos aislados; mucha forma y poco fondo fue la conclusión de la actuación de El Cejas.