Efemérides: La confirmación de Payo en Madrid
Un lustro de la confirmación de Octavio en Las Ventas
Este 20 de mayo se cumplió del primer lustro de la confirmación de alternativa del diestro queretano Octavio García "El Payo" en Las Ventas de Madrid, el primero de esta nueva camada de toreros mexicanos en ratificar su doctorado en la catedral del toreo.
Aquella tarde su anunciaba un encierro de la ganadería de Peñajara y El Payo, que lució un precioso vestido en azul rey y oro, confirmó la alternativa de manos del madrileño Miguel Abellán y bajo el testimonio del catalán Serafín Marín.
El toro de la ceremonia fue de la ganadería de Hermanos Torres Gallego, sobrero sustituto, pues el titular, de Peñajara, fue devuelto a los corrales. Así pues, el ejemplar de la efeméride llevó por nombre "Arábigo", número 86 y con 540 kilos, tras el que el resultado fue silencio tras aviso.
El segundo de su lote aquel día fue también sobrero, de la ganadería de Pío Tabernero, con el que tuvo una actuación muy sólida y dio una vuelta al ruedo con fuerza, luego de torear templadamente, largo y con la mano baja, dejando una muy grata sensación en Las Ventas.
Antonio Lorca, en el diario El País, destacó la actuación del mexicano:
"Pero algo se puede salvar del desastre. Primero, el torero mexicano El Payo, que sorprendió a todos con su arrojo, valentía, disposición e inteligencia. Mató dos sobreros; al primero, un toro bronco que lanzaba gañafones al final de cada muletazo, lo sometió con gran pundonor y le robó un par de tandas muy meritorias.
"El sexto era un soso zambombo con el que estuvo hecho un tío, un torero de los pies a la cabeza, y trazó muletazos hondos por ambas manos, aunque sin la necesaria continuidad. Tiene pinta de torero este mexicano. Será lo que tenga que ser, pero su forma de estar en la plaza y su disposición le auguran un futuro prometedor.
"Que no se olvide el tercio de quites que él y Abellán protagonizaron en el primero. Hasta cinco quites entre ambos: El Payo, por gaoneras, chicuelinas y delantales, y Abellán, por verónicas y delantales. No fue un tercio grandioso, pero sí alegre, emotivo y novedoso en tiempos de tanta uniformidad".
Durante su etapa como novillero, Octavio había ya dado la cara en esta plaza. El 17 de septiembre de 2007 cortó una valiosa oreja en el Ciclo "Ocho Naciones", certamen del cual fue declarado triunfador. El 19 de mayo de 2008 cuajó una gran faena que malogró con la espada y, en su segundo, sufrió una cornada.
El Payo, surgido de Tauromagia Mexicana, tomó la alternativa el 26 de octubre de 2008, en Pachuca, de manos de Morante de la Puebla y bajo el testimonio de Castella y Garibay, ente toros de Fernando de la Mora. Confirmó en La México el 18 de enero de 2009, llevando como padrino a José Tomás y por testigo a Arturo Macías, con un encierro de Teófilo Gómez.
Aquella tarde su anunciaba un encierro de la ganadería de Peñajara y El Payo, que lució un precioso vestido en azul rey y oro, confirmó la alternativa de manos del madrileño Miguel Abellán y bajo el testimonio del catalán Serafín Marín.
El toro de la ceremonia fue de la ganadería de Hermanos Torres Gallego, sobrero sustituto, pues el titular, de Peñajara, fue devuelto a los corrales. Así pues, el ejemplar de la efeméride llevó por nombre "Arábigo", número 86 y con 540 kilos, tras el que el resultado fue silencio tras aviso.
El segundo de su lote aquel día fue también sobrero, de la ganadería de Pío Tabernero, con el que tuvo una actuación muy sólida y dio una vuelta al ruedo con fuerza, luego de torear templadamente, largo y con la mano baja, dejando una muy grata sensación en Las Ventas.
Antonio Lorca, en el diario El País, destacó la actuación del mexicano:
"Pero algo se puede salvar del desastre. Primero, el torero mexicano El Payo, que sorprendió a todos con su arrojo, valentía, disposición e inteligencia. Mató dos sobreros; al primero, un toro bronco que lanzaba gañafones al final de cada muletazo, lo sometió con gran pundonor y le robó un par de tandas muy meritorias.
"El sexto era un soso zambombo con el que estuvo hecho un tío, un torero de los pies a la cabeza, y trazó muletazos hondos por ambas manos, aunque sin la necesaria continuidad. Tiene pinta de torero este mexicano. Será lo que tenga que ser, pero su forma de estar en la plaza y su disposición le auguran un futuro prometedor.
"Que no se olvide el tercio de quites que él y Abellán protagonizaron en el primero. Hasta cinco quites entre ambos: El Payo, por gaoneras, chicuelinas y delantales, y Abellán, por verónicas y delantales. No fue un tercio grandioso, pero sí alegre, emotivo y novedoso en tiempos de tanta uniformidad".
Durante su etapa como novillero, Octavio había ya dado la cara en esta plaza. El 17 de septiembre de 2007 cortó una valiosa oreja en el Ciclo "Ocho Naciones", certamen del cual fue declarado triunfador. El 19 de mayo de 2008 cuajó una gran faena que malogró con la espada y, en su segundo, sufrió una cornada.
El Payo, surgido de Tauromagia Mexicana, tomó la alternativa el 26 de octubre de 2008, en Pachuca, de manos de Morante de la Puebla y bajo el testimonio de Castella y Garibay, ente toros de Fernando de la Mora. Confirmó en La México el 18 de enero de 2009, llevando como padrino a José Tomás y por testigo a Arturo Macías, con un encierro de Teófilo Gómez.