La Unión de Criadores de Toros de Lidia de España ha enviado una carta dirigida al matador Miguel Abellán, Director del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, para solicitar que se dejen de exhibir los toros en los corrales de El Batán, mismos que se están lidiando en la plaza de Las Ventas durante esta Feria de San Isidro.
El motivo de esta solicitud es que no conviene que los toros estén tantos días en este reciento, ya que se trata de un doble manejo antes de llegar a la plaza, y aunque se trata de una iniciativa que pretende fomentar que el público los admire, tal y como ocurría hace muchos años, al final el ganadero pierde el control sobre una material prima hoy tan complicada de "poner" para la primera plaza del mundo.
"La UCTL nunca tuvo conocimiento explícito de este punto en el pliego de condiciones de la plaza de toros de Las Ventas hasta su publicación y aprobación.
El reconocimiento veterinario debe realizarse siempre previo a la exposición en la Venta del Batán, tal y como sucede en otras plazas de primera categoría en España y Francia (Pamplona, Dax, Nimes, Arles...).
Las instalaciones de la Venta del Batán deben disponer de un acondicionamiento técnico adecuado para la realización del obligado reconocimiento veterinario siendo la plaza de toros de Las Ventas la única del mundo que realiza el reconocimiento después de días de exposición pública.
Siempre buscando ofrecer las mejores garantías para el espectáculo, desde la RUCTL se solicita al director gerente del Centro de Asuntos Taurinos de la CAM suspender la exhibición de los toros hasta que se realice el reconocimiento previo de los toros en la Venta del Batán, que la participación de cada ganadería sea siempre voluntaria y que se elimine el obligado porcentaje de participación (50 por ciento de las ganaderías anunciadas).
Durante los primeros festejos celebrados en esta feria de San Isidro y los de la feria de otoño de 2022 se han venido ocasionando numerosas bajas de animales que no han podido lidiarse por lesión o por pérdida de peso en su estancia en el Batán. Los ganaderos afectados han mostrado públicamente su desaprobación y han elevado su queja.
El hecho de exhibir a los toros previstos para lidiarse en Las Ventas conlleva riesgos: doble traslado de corrales, peligro de lesiones y/o fractura de pitones, sometimiento a mayor estrés, paralización de su alimentación y de su preparación física, cambio de manejo, olores, condiciones climatológicas, y, principalmente, pérdida de peso previo a su llegada a Las Ventas donde la báscula marcará su peso oficial tras días en la Venta del Batán.
Por todo ello, esta Entidad entiende que minimizar los riesgos a los que puede someterse el toro, que el ganadero ha estado minuciosamente cuidando durante más de cuatro años, debe ser el objetivo prioritario".