El novillero mexicano Andrés Suárez del Real fue uno de los triunfadores del festejo sin picadores celebrado ayer en la plaza de Bayona, donde cortó una oreja a un ejemplar de la ganadería de Camino de Santiago al que dio una lidia completa y variada que gustó mucho al público francés.

El zacatecano toreó bien con el capote, pues luego de los lances de recibo al a verónica hizo un vibrante quite por gaoneras antes de cubrir el segundo tercio con emoción, pues colocó el Par Monumental, lo que sin duda causó la admiración en la gente por la dificultad de la ejecución y porque nunca antes lo habían visto en vivo.

La faena tuvo pasajes buenos por ambas manos y como mató de una estocada, de la que fue volteado sin consecuencias, le concedieron una merecida oreja.

Andrés Suárez del Real, que actualmente es alumno de la Escuela Taurina de Espartinas, que dirige el padre del maestro Espartaco, compartió cartel con Pablo Gallego (Escuela Taurina de Cercedilla, Madrid), que tuvo silencio; Álvaro Lorenzo (Escuela Taurina de Toledo), que dio una vuelta, y Clemente (Escuela Taurina de Burdeos, Francia), que también cosechó un apéndice.