Ventura triunfa en Guadalajara
El día de hoy tras la faena que realizó a un toro de regalo
Contra su costumbre hoy, ni La Venta del Refugio, ni La Estancia fueron materia prima valiosa para las grandes faenas que dichos astados nos han acostumbrado. Hay tardes así.
Sin embargo, Diego Ventura, con un toro obsequiado de San Isidro (que tampoco fue tan pródigo, que digamos) cortó "a sangre y fuego" un par de trofeos. Luis David, con el santo de espaldas en el sorteo, toda la tarde buscó un triunfo malogrado con los aceros. Y Leo Valadez se dejó el triunfo en sus fallos con los aceros.
"Escribano" de nombre, toro de regalo, se dedicó de salida, a cazar al torero de a caballo, quien en su toros de la lidia ordinaria había entusiasmado la parroquia, con piruetas entre los pitones, alzadas con sus finos caballos y colocado pares a dos manos con su cabalgadura sin riendas.
Hasta que el de San Isidro consiguió su objetivo, y en un resbalón inoportuno derribó al penco de Ventura. Éste cayó sobre su pierna izquierda y lesionó también el hombro izquierdo, de hecho, en la foto de portada, claramente se nota cómo cuelga el brazo zurdo de Diego. Así continuó en la lidia para conseguir sus mejores momentos de la tarde, sepultar el rejón de muerte y entre aclamaciones pasear dos orejas en una vuelta dolorida y triunfal en la "Nuevo Progreso".
Hasta el momento de escribir ésta crónica, nos compartió el doctor Francisco Preciado, jefe de los servicios médicos de plaza, se le practicaba una resonancia magnética, para evaluar la gravedad latente de las lesiones, debido, sobre todo, al intenso dolor que aún tiene el herido.
Luis David no tuvo materia prima para un buen trasteo; sin embargo, la responsabilidad a tope le motivó a intentar lo imposible, con el débil y soso segundo de la tarde. Y con el segundo de su lote aguantó algunos parones. Toros sin malas ideas, pero poca, muy poca disposición.
El aguascalentense Leo Valadez, cada vez nos ilusiona más, no tiene Valadez, sólo una entrega total; le funciona la cabeza y a leguas se le ve transpirar el gusto por su profesión, al que le correspondió primero, lo recogió de salida con suavidad, enseguida tres verónicas, una chicuelina y remate por revolera que arrancó su primera ovación fuerte de la tarde. El toro parecía lesionado de su mano izquierda y los tendidos protestaban; pero Valadez no se amilanó.
Con la muleta, pronto lo entendió, le trató con pinzas, y rápido olvidamos la presunta lesión, con base en toreo de buen gusto, aguanta a su enemigo cuando se requiere. Vinieron enseguida series por ambos, con temple y mano baja, sepultó una entera que no bastó, falló al primer intento con la de cruceta, para acertar al segundo golpe. Adiós oreja.
Con "Lebrijano" (vaya compromiso en el nombre) tuvo el aguascalentense sus mejores momentos, Recibió al de La Estancia con dos verónicas, par de tafalleras ligadas con caleserinas y doble remate de revolera que hicieron crujir las gradas tapatías. Colocó al toro en varas por tapatías, para enseguida realizar una soberbio quite por zapopinas de mucha quietud y muy bien toreadas además, al remate de media verónica la plaza estalló de nuevo.
Cubrió el tercio de banderillas, con más voluntad que acierto, inició el tercio de muerte de hinojos, pero el estancieño se queda un tanto corto y prueba, ya de pie se enreda en series por ambos lados, para concluir su faena con un alarde.
De frente al toro, con la muleta –sin ayudado– escondida tras su cuerpo la extiende en el último instante, que emociona al público. Enseguida, como dice Emmanuel "Todo se derrumbó" Cuatro pinchazos, un aviso y varios golpes con la espada corta.
Para el próximo domingo 17 de noviembre, la empresa anuncia a las 16.30 horas, seis toros de Jaral de Peñas, para Antonio Ferrera, Joselito Adame y Andrés Roca Rey. Pinta el cartel, para un agarrón de aquellos.
Ficha
Guadalajara, Jal.- Plaza "Nuevo Progreso". Primera corrida de la temporada. Ocho mil personas en tarde soleada y agradable. Dos toros de La Venta del Refugio para rejones (1o. y 4o.) cuatro de La Estancia y uno de San Isidro como regalo para rejones, bien presentado y de juego variado, entre los que destacó el 7o. Pesos: 495 525 515 480 520 570 y 540 kilos. Diego Ventura: Palmas, ovación y dos orejas en el de regalo. Luis David (blanco y oro): Silencio y palmas. Leo Valadez (turquesa y oro): Palmas y palmas tras aviso. Incidencias: Diego Ventura fue derribado durante el tercio de banderillas ante un toro de regalo, a pesar de ello, continuó la lidia y al finalizar el festejo se trasladó a la clínica Country 2000 donde se espera un parte médico oficial que permita conocer la gravedad de las lesiones.
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