Ante una gran concurrencia y en emotiva ceremonia, celebrada en uno de los salones del Restaurante Arroyo, se realizó la premiación de la vigésima temporada de novilladas, siendo declarado Óscar Amador como el triunfador del serial.

Además de su trofeo, el tlaxcalteca recibió un terno grosella y azabache, obsequiado por los aficicionados José y Enrique Reyes, que desde la presentación de la campaña, allá por el mes de julio, habían prometido para el joven que resultara designado como triunfador del serial.

Los premios se repartieron de la siguiente manera:

Mejor banderillero: Christian Sánchez; lo entregó Delfino Campos.

Mejor picador: César Morales; lo entregó Pepe Arroyo hijo.

Novilleros Revelación: Christian Verdín y Antonio Galindo; trofeos entregados por el empresario Marco Castilla y Berenice Arroyo, respectivamente.

Mejor estocada: Salvador Barberán; lo entregó Alfredo Gutiérrez a Diego Carmona, en representación del novillero español.

Mejor faena: Adrián Padilla; lo entregó el matador Alberto Huerta.

Novillero triunfador: Óscar Amador; lo entregó el empresario José Arroyo.

Mejor novillo: "Albricias", de la ganadería de De Haro; premio entregado a Antonio de Haro González por el ganadero Ramiro Alatorre.

Mejor encierro: Ganadería de Jorge de Haro; premio entregado a Jorge de Haro González de manos de Chacho Vázquez.

Mejor novillo del concurso de ganaderías: "Buen Amigo", del hierro de Huichapan; premio entregado a don Adolfo Lugo Verduzco de manos de don Jesús Arroyo. Además, se le obsequió al ganadero la cabeza de este ejemplar, que fue donada por el novillero retirado y taxidermista Genaro Hernández.

Las dos intervenciones más elocuentes corrieron a cargo de los ganaderos Jorge de Hero y don Adolfo Lugo, respectivamente. El primero destacó la importancia de esta plaza y la calificó como "el sagrario" del toreo; el sitio donde se vive y se siente la Fiesta de manera muy especial, y un reducto donde se conserva la tradición con mucha entrega. El segundo, afirmó que la Plaza Arroyo "es un ejemplo de seriedad y organización", donde la labor de los señores Arroyo ha dado magníficos frutos con el paso del tiempo.

Después de la premiación, y de que cada uno de los triunfadores dijera unas breves palabras, le fue entregada una placa a don Jesús Arroyo como reconocimiento a tantos años de impulsar a la Fiesta de los Toros. Este presente fue iniciativa del pintor Paco Álvarez. El galardón tenía grabadas las firmas de los periodistas taurinos que acudieron a curbrir la pasada temporada.

Y en el marco de esta fiesta, se recordó a José María Luévano, fallecido el día de ayer, al que se le tributó un minuto de aplausos con mucho cariño, al igual que al matador Gilberto Azcona, que fuera muy asiduo a las novilladas de cada sábado en esta plaza de toros.

En el evento, conducido por Guillermo Leal, estuvieron presentes una gran cantidad de periodistas taurinos, así como novilleros, subalternos, apoderados, empresarios y diversas personalidades de la llamada Familia Taurina.