Lorenzo Garza Gaona se encuentra contento por haber podido tocar pelo el día de ayer en La México, pero es consciente que es apenas un paso en su carrera y aún falta mucho trayecto para poder consolidarse como lo que quiere ser.

-¿Cómo te dejó la tarde de ayer?

-La verdad contento, pues pude cortar una oreja. Ahora bien, tampoco estoy totalmente satisfecho, ya que no logré redondear un triunfo muy fuerte. Yo creo que se dejó buena impresión y esto habrá de servirme bastante.

-¿Qué lidia tuviste que darle a ese novillo al que le tumbaste la oreja?

-Pues mira, era un novillo muy noble y que dejaba estar ahí, Me acoplé a sus embestidas y pude pegarle muletazos de calidad, disfrutando esa faena y creo que el público estuvo también a gusto a lo largo del trasteo.

-¿Qué pasó por tu cabeza al ejecutar ese quite por gaoneras que tan popular hizo tu bisabuelo?

-Fue muy emocionante. No lo taría pensado, no sabísa que quite iba a hacer, pero vi que el toro se arrancó con alegría y decidí echarme el capote a la espalda y pegarse, muy despatarrado, esas gaoneras.

-Un momento muy emotivo...

-Sí, fue muy bonito, pues escuché esos olés que La México tan únicos; esos rugidos que de verdad ya aún no terminaba una gaonera y ya quería pegar la otra para seguir oyendo la reacción del público.

-¿Y cómo te sentiste con tu segundo?

-Pues era un novillo que desarrolló muchas compliaciones y no se pretsaba mayormente para el lucimiento. Sin embargo intenté dejar en claro que tengo ganas y muchos deseos de figurar, así que busque sacarle la mayor cantidad de pases posible, vamos, que la gente viera que por mí no iba a quedar.

-¿Te pesó que un sector del público te presionara, mientras que otros te apoyaban?

-Ni, mira yo sé que eso es normal e iba muy mentalizado. Sabía que iba a encontrarme con aficionados dispuestos a disfrutar, mientras que otros irían con el deseo de reventarme o pitar. Ahora, la mayor parte de la plaza estaba a mi favor.

-¿Qué conlusiones sacas de esta tarde, qué cosas debes pulir?

-Sé que lo de ayer es solamente un primer pasito y hay que seguir entrenando fuerte, examinando lo que se hizo para hacerlo diez veces mejor. Yo quiero ser una figura del toreo y no conformarse con ser sólo un buen torero, cortar una oreja, que eso no vale para nada. Quiero triunfar rotundamente y estar mejor la siguiente tarde, si es que hay oportunidad de volver.

-¿Y habrá esa oportunidad?

-Sí, me parece que es lo más seguro, aunque no lo sé exactamente, es decisión de la empresa y yo estoy a la expectativa.

-¿Algún mensaje para la afición?

-Que los invito a verme, si es que repito, pues me verán mejor, con más ganas de triunfar y no voy a quedar mal.