El novillero Juan Pablo Sánchez se encuentra concentrado en la ganadería de Alcurrucén, donde ha permanecido prácticamente desde hace dos años, preparándose a conciencia para su repetición del próximo domingo en Las Ventas de Madrid, donde actuará en la final del certamen de novilladas nocturnas de Digital Plus tras su triunfo del pasado 25 de julio.

En esta semana completará un entrenamiento muy intenso consistente en matar seis toros a puerta cerrada, de los que todavía le faltan dos el día de hoy, y otros dos más el próximo viernes. Y aunque ya demostró que anda bien con la espada, que hace todavía algunos meses era su talón de Aquiles, Juan Pablo aprovechará esta preparación para perfeccionar aún más su técnica con el acero.

El reciente triunfo del hidrocálido en Madrid le ha granjeado el respeto de los profesionales y la admiración del público, y su administración se encuentra cuadrando las fechas que le han salido para torear novilladas antes de su alternativa, prevista el sábado 18 de septiembre en el coliseo francés de Nimes.

Será en los próximos días cuando se tenga noticia de los festejos menores de su agende antes de recibir la alternativa. Entretanto, su mente está centrada en la plaza de la calle de Alcalá, donde tiene otro de los compromisos más importantes de su prometedora carrera.