Con el fin de rendir un homenaje al matador de toros en retiro, Alfredo Gutiérrez, un grupo de amigos organizó en su honor la exposición fotográfica "Expresión y Verdad", en Casa Masúa, de Guadalajara, Jalisco, la cual estará a la vista del público hasta el martes 30 de septiembre.

La exposición consta de 30 obras de diferente formato y son obra de los fotógrafos Paulina Sevilla, Néstor Flores y Luis Aqua y contó además en la parte de producción creativa y curaduría, con el talento de Margaret Serment del Peral.

En cada imagen, Alfredo Gutiérrez revela la esencia de un legado que trasciende el tiempo: la valentía que se hace arte, la tradición que se viste de elegancia. Su figura se alza como un símbolo de fuerza contenida y sentimiento profundo, donde cada gesto al torear es un diálogo entre la vida y la belleza.

"Estas fotografías no solo capturan un instante, sino la herencia de un arte que se expresa con autenticidad, disciplina y sensibilidad. Alfredo se convierte así en reflejo de un torero que honra su pasión con la elegancia de lo clásico y la intensidad de lo eterno", se puede leer en los muros de la galería.

El homenaje a Gutiérrez se hace con esta exposición que visitará diferentes partes del país y de Europa. Su inicio fue la semana pasada y permanecerá hasta el último día de septiembre. La exposición seguirá recorriendo algunos estados del país y por lo pronto las siguientes fechas están previstas para Tlaxcala, Aguascalientes y San Luis Potosí.

"Este es un homenaje a mi trayectoria que me hacen unos amigos de San Luis Potosí y que se inauguró en Guadalajara hace unos días. Es algo padrísimo, ya que no me lo esperaba. Me dijeron que los homenajes pueden ser en cualquier día, en vida y las fotografías son mías, pero no toreando, son fotos posadas, un poco de lo que hacía cuando toreaba y ahora también le incluìmos fotografías en la moto, ya que me gusta andar en motocicleta de ruta", comentó Gutiérrez.

En la inauguración estuvo acompañado de su familia, hijos y papás.

Alfredo Gutiérrez nació en el entonces Distrito Federal, el 8 de septiembre de 1978 y tomó la alternativa el 30 de noviembre de 1997 en la Plaza de Toros México, de manos de su tío el matador Jorge Gutiérrez y como testigo, Enrique Ponce, con el toro "Novel", de la ganadería de Santiago.