Fermín Espinosa "Armillita IV", como decían los antiguos cronistas, anda tumbando caña por todas partes y, lo que es más, sus triunfos recientes lo tienen muy motivado de cara al cierre de la campaña. Este noviembre próximo, el menor de la dinastía cumplirá nueve años como matador de toros, en los que ya ha logrado pasar del centenar de corridas y con una buena cosecha de orejas y rabos en su palmarés.

En los primeros años, le ha costado mucho entrar en el gusto del público, no de los buenos aficionados que saben de su capacidad taurina, sino por tener que enfrentar a esos que, escudándose en las redes sociales, les gusta crear un mal ambiente a los toreros dentro y fuera de las plazas, creyéndose que lo saben todo.

"Yo me encuentro muy motivado y contento, en un gran momento como torero. Con estos años de experiencia y ya con 106 corridas de toros se va notando, el toreo es mi vida, estoy dedicado a mi profesión en cuerpo y alma. Por eso cada corrida que vaya saliendo trataré de aprovecharla al máximo".

Alternativado matador el 1 de noviembre de 2014 en la Monumental de Aguascalientes, de manos de Alejandro Talavante y Octavio García "El Payo", Fermín, como muchos otros jóvenes de su edad, sacrificó a su familia y a sus amigos por irse a preparar a España, para cumplir su sueño de ser torero.

"Ha sido una carrera positiva. Desde novillero he triunfado aquí en México y ahí están las estadísticas desde que tomé la alternativa, he tenido triunfos importantes en muchas plazas de la república mexicana". En sus cuatro recientes actuaciones, Armillita ha salido a hombros consecutivamente, la más reciente el viernes pasado en San Luis Potosí, donde volvió a triunfar fuerte.

“Soy un privilegiado de poder ir a muchos lados y ha sido un balance muy positivo. Tardes que también no ha habido suerte con la espada, como pasa en esta carrera, pero que han sido tardes de aprendizaje. Siempre he tratado de triunfar en todas las plazas donde me presento y mi balance cada año es muy bueno, pero sí lamento que me ha faltado tener suerte en la Plaza México para ratificar mis triunfos que he tenido en provincia".

Luego, a pregunta expresa, se refirió de esos aficionados que escriben sin saber, solo por matar el tiempo.

"Obviamente, la exigencia siempre ha estado ahí, como es normal, pero para todo siempre hay una respuesta y esa está en mis estadísticas. Sí, he sentido la exigencia conmigo más en redes sociales, es ahí donde más la gente me traía entre ceja y ceja, bueno, algunos aficionados. Pero también esa exigencia me ha servido para superarme a mí mismo. Claro, es duro, al principio estás empezando y tienes menos experiencia y oficio o quizá no estás acostumbrado a que la gente te exija, gente que habla sin motivo y sin razón. Eso lo he sentido en La México, siendo sincero, el ambiente en contra desde el paseíllo y si le agregas que no he tenido suerte con mis toros, todo se me ha juntado".

Con once corridas hasta el momento, Fermín no cede un ápice y todos los días se le ve entrenando, pues sabe que, en cualquier momento, hasta una sustitución es buena, como la de Jalostotitlán en la que entró en lugar del rejoneador Tarik Othón y al final fue el triunfador.

“El toro ha sido mi vida desde niño, es lo que yo siempre he soñado ser y lo que tengo que hacer es hablar con la espada y la muleta y gracias a Dios estas corridas recientes me han servido mucho, de que no bajo la guardia y de que quiero seguir madurando en mi profesión como torero. Dedicado a cuerpo y alma, a mi profesión, vivo para ella. Para triunfar hay que estar preparado y entrenar todos los días".

Fermín anhela llegar a ser por sí mismo ese torero que las empresas lo busquen, por sus triunfos, por su carisma y aporte a la fiesta. Ahora mismo, confiesa, como siempre ha sido su padre, el maestro Fermín, quien está cerrando sus contratos que le surgen, toda vez que José Antonio Ramírez "El Capitán", ya no lo apodera.

"Mi papá es el que me está ayudando, es quien me cierra los contratos y por eso también yo tengo que darle argumentos para que pueda cerrarlos más fácil.

Es una lástima y me da mucho coraje que la Plaza México siga cerrada. Es la que te catapulta y la que te da y te quita. Tengo muchas ganas de poder reafirmar mis triunfos que llevo como matador en La México porque es lo que necesita mi carrera, llegar a la México y tener un triunfo importante para colocarme en un sitio importante del toreo, donde siempre he soñado estar".

Por lo pronto el joven matador hidrocálido continúa preparándose para sus próximos compromisos que serán en septiembre, uno el 16 en el Palacio del Arte de Morelia, al lado de Tarik Othón, José Mauricio y Sergio Flores y otro que está por anunciarse.