Reacciones a la muerte de El Vito
La familia taurina expresa su pesar por la partida del periodista
La muerte de Víctor José López "El Vito" ha provocado una cascada de mensajes de pésame y solidaridad, donde diversas personalidades del medio taurino, principalmente matadores de toros, han expresado su sentir al respecto de este comunicador tan importante en la fiesta de los toros.
Jorge Gutiérrez (matador de toros):
"Estamos tristes por la partida de nuestro amigo Víctor López "El Vito", una gran persona, muy valiosa, con mucha calidad humana y valiosa para toda la Fiesta Brava en todo el mundo. Estamos muy conmovidos, siempre fue un gran amigo, yo lo conocí de novillero cuando fui a Caracas a torear que me hicieron favor de llevarme gracias a la recomendación de mi amigo Curro Leal. Desde el primer momento era una gente muy sencilla, muy amable, muy conocedor de la Fiesta, se aprendía mucho estando con él, daba gusto platicar de toros y de cualquier asunto. Una persona muy culta, nos va a hacer mucha falta lo vamos a extrañar y que en gloria esté, un gran amigo de los que siempre nos hacen falta".
Manolo Arruza (matador de toros):
"Cuando un amigo se va, como el reconocido Víctor José López mejor conocido como El Vito, dejando una huella que no se puede borrar, inolvidable personaje que amó profundamente la Fiesta de los toros. Procurando siempre apoyar a los toreros mexicanos,
Eloy Cavazos (matador de toros):
"Víctor José López fue un hombre que admiró y quiso a los mexicanos como nadie en Venezuela. El Vito, mexicano que llegara se desbordaba con él, nos llevaba a pasear, nos hacía entrevistas, nos daba mucho apoyo en ese gran diario donde él escribía para darle ambiente a las corridas y presentarnos con la afición de Venezuela. Toreamos juntos en Laredo un festival porque aparte de un gran periodista y amigo, también le gustaba echar capa, de verdad que la noticia me ha caído como balde de agua helada. Un hombre que queremos y que vamos a querer toda la vida todos los toreros mexicanos y en particular este servidor Eloy Cavazos, yo le decía hermano a El Vito, pero él era hermano de todos los toreros mexicanos".
Paco Aguado (periodista y escritor):
"Se va un grande del periodismo taurino, un clásico. Con toda la memoria del toreo en la cabeza y en el corazón. El Vito era la memoria viva de la tauromaquia de gran parte del siglo XX, como lúcido testigo que fue, y en primera fila, tanto de los años dorados del toreo en Venezuela como en ese México que tanto amaba o en esta España en la que tantos amigos y admiradores ha dejado. Personalmente, nunca olvidaré las largas y templadas charlas, gozando de su sabiduría, que tuve, a los dos lados del Atlántico, con quien considero un auténtico maestro, en el más estricto y maravilloso sentido de la palabra. Me queda todo eso, me quedan todos sus libros y sus dedicatorias cariñosas, y el honor de haber podido colaborar con él en alguno de ellos. Tristemente, nos deja uno de los último grandes de la información taurina, tan grande como la persona que fue".
Javier Borrego (ganadero de Santa Bárbara):
"Una triste noticia de un hombre que es un referente dentro del periodismo taurino, tanto de su país Venezuela como de toda América y en España donde tuvo tantos amigos, desde figuras del toreo, empresarios, ganaderos y aquí en México no se diga. Yo conocí a El Vito a principios de los años 80 en Los Cués con don Javier Garfias, tenían una gran camaradería entre ellos de cuando las ganaderías mexicanas lidiaban en Venezuela y en Sudamérica. Conviví mucho con él, con Pepe Garfias en la hacienda de De Santiago, donde acudimos a muchos tentaderos. Fue un hombre afable, alegre, muy fácil de hacerse amigo de él, muy culto, gran conversador, entusiasta y aficionado a los toros hasta los tuétanos. A raíz de su último libro de Garfias, tuvimos mucha comunicación vía telefónica, ya que él requería muchos datos de lo que era el encaste Garfias, y convivimos en muchas llamadas con mucho tiempo de intercambio. Realmente estoy triste y compungido fue muy rápido todo su desenlace. Lo recordaremos en México con mucho cariño".
Leonardo Benítez (matador de toros):
"Fue el último de los mohicanos, junto con Juan Cumella fueron mis dos últimos apoderados. La última vez que conviví con él, antes de venir a México, pasé por su casa estuvimos allí hablando de toros, ilusionados porque a esa edad que tenía don Víctor le ilusionaba que yo regresara a los ruedos en Venezuela y que fuésemos por allí regando esta pasión en los pueblos. Todavía hace un año me decía como había que torear y me decía: "mira Leonardo, hay que poner la "muletica" más cuadradita como el maestro Antoñete", que fue uno de sus grande amigos a los que les echó la mano cuando estuvo en Venezuela y de ahí resurgió a España en su última etapa como torero. Yo lo viví en vida que es donde vale la pena, tuvimos un comienzo hermoso porque el fue compadre de Raúl Izquierdo que fue el primero que confió en mí cuando yo llegué aquí a México. Fue un apoyo total en mi vida como torero, la mitad de la carrera pues hubieron fuertes problemas y, a la postre, terminó siendo mi apoderado".
Alfredo Gómez "El Brillante" (matador de toros):
"Tuve la fortuna de conocerlo hace 47 años cuando Jorge Gutiérrez y yo estuvimos de novilleros en Venezuela, y nos trató de maravilla. Fui muy amigo de él, y tanto en Venezuela como en México como en España, tuve la oportunidad de convivir muchas veces con él, hacerle un homenaje con otros toreros aquí en la Plaza de Arroyo, no tengo más que gratos recuerdos, un gran ser humano, una pluma extraordinaria, como crítico taurino era extraordinario, como ser humano, como padre. Me duele su partida pero sé que ya está con todos sus amigos y disfrutando de la fiesta de toros en el cielo y que Dios lo tenga en su gloria. Te mando un abrazo hasta el cielo Víctor".
Manuel del Prado "El Triste" (novillero):
"Me siendo destrozado con esta noticia tan lamentable, porque El Vito era un amigo entrañable que a mí me ayudó mucho cuando estuve en Venezuela tratando de torear como novillero. En estos últimos años tuvimos un contacto más frecuente cuando estaba escribiendo el libro sobre don Javier Garfias. Era un hombre muy entusiasta; un hombre demasiado apasionado por el toro y la Fiesta, y fue un gran admirador de El Soldado, de Luis Procuna, de Juan Silveti... de un larga lista de figuras a las que promovió y defendió a capa y espada. Tenía un gran cartel en Venezuela, en el periódico El Meridiano, donde hizo escuela como director. Ahí publicaba muchas noticias del acontecer del México taurino, al grado de que muchos aficionados venezolanos pensaban que era mexicano, con eso he dicho todo. Fue un gran profesional de la información, muy culto, y un aficionado con unos conceptos impresionantes. Un día nos invitó a Arturo Magaña y mí a pasar una noche de Navidad a su casa, un gesto que habla de él como persona y su inmensa generosidad. Lo vamos a extrañar muchísimo porque era un pedazo de amigo".
Manuel García "Pinocho" (novillero y apoderado):
"Hace poco tiempo hablé con él y me comentó lo de su enfermedad, pero también su entusiasmo por al vida y me dijo que quería venir a Madrid a comer en distintos restaurantes que le gustaban. Era mi padrino, un fenómeno, que me ayudó tantísimo. Tuvimos una amistad de más de 45 años. De chaval entrenaba con él y me decía muchas cosas que me servían. Y cuando me vine a España también me ayudó recomendándome con ganaderos y varias figuras del toreo que eran sus amigos para que me llevaran a las tientas. He llamado a algunos de sus amigos, maestros como Paco Camino, Roberto Domínguez, Capea... y también a José Carlos Arévalo, Paco Aguado o Luis Álvarez, para comentar este lamentable deceso y, quienes lo queríamos, estamos muy consternados. El Vito fue el eje del toreo en Venezuela y a todo mundo le echó un cable: a los grandes, a los modestos, a todos. La relación con él era más humana que profesional, porque era un hombre que te hablaba con el corazón".
Víctor Ramírez "Vitico" (periodista venezolano):
"El maestro seguirá siendo, por siempre, un gran referente para todos nosotros. Su afición era inmensa, porque todos los días estaba buscando aprender. Leía mucho, investigaba y estudiaba los distintos aspectos de la Fiesta con mucho apasionamiento. En estos últimos meses estaba inmerso investigando para hacer una historia del Nuevo Circo de Caracas y tuve el privilegio de que me pidió que le ayudara con las estadísticas, que es una área que a mí me interesa mucho. Su muerte ha sido una pena y lo bueno es que nos deja su imborrable recuerdo y, sobre todo, sus grandes enseñanzas como lo que fue: una excelente persona y un maestro del periodismo".
Rubén Darío Villafraz (periodista venezolano):
"En 2001 en la feria de Valencia nos conocemos personalmente, manteníamos contacto telefónico. Una persona atenta y servicial, las veces que lo visité en el diario "El Meridiano", era impresionante como hablaba de estilos, de maneras, de redacción, detalles tan importantes que lo hicieron un verdadero maestro, amigo y gran persona. En la pasada Feria de San Sebastián lo vi muy pálido en el callejón, noté que tenía esas lesiones de piel, le sugerí que se hiciera una hematología. Se hizo su estudio y fue que le aparecieron esos niveles tan bajos de leucocitos y plaquetas. Triste que se nos haya ido tan rápido, alguien insustituible como persona y como amigo".
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