El experimentado rejoneador potosino Jorge Hernández Gárate, se encuentra muy satisfecho por los triunfos conseguidos la semana de Carnaval, en Jalisco, donde cosechó la friolera de siete orejas y un rabo, en cuatro tardes que realizó el paseíllo.
"Fue un sueño hecho realidad de poder torear cuatro días seguidos y el poder estar en Guadalajara en una corrida de rejones después de más de 15 años que no se daba una corrida así", comentó.
Hernández Gárate agregó que el poder triunfar en las plazas de Autlán de la Grana, Guadalajara, Tecolotlán y Ameca, fue muy satisfactorio para él y sobre todo para su carrera, por la forma en la que se están dando las cosas este año.
"Ha sido un año bueno y muy productivo, pues en dos meses hemos toreado seis corridas. Nos repusimos del percance de San Luis y, aunque en Guadalajara también me volví a caer, no fue de gravedad, pero el hecho de haber cortado una oreja en esa plaza, ahora con la México cerrada, eso es gasolina pura", señaló.
El potosino destacó como muy importante el haberse arreglado con el ganadero y empresario Juan Pablo Corona para actuar en el carnaval de Autlán, que considera como el más importante de la región y haber podido cortar la oreja.
"A los dos días fuimos a Tecolotlán, después Guadalajara, donde la corrida original era alternando con Diego Ventura y Emiliano Gamero, pero al resentirse Diego hubo oportunidad de torear dos toros más.
Cerramos los Carnavales en Ameca, en una corrida mixta con El Galo y Lalo de María, el hijo de la rejoneadora María Sara, con toros de mi ganadería Hernández Andrés, a los que les corté las cuatro orejas y un rabo".
Agregó que afortunadamente los seis caballos que utilizó estuvieron a la altura, a pesar del cansancio de viajar mil 700 kilómetros, entre las cuatro ciudades.
"En todas las plazas hubo de todo, toros complicados, toros buenos y al final parte de los años la madurez de poder disfrutar diferentes tipos de toros, en diferentes plazas y con diferentes responsabilidades".
Jorge reconoció que, hoy por hoy, la plaza "Nuevo Progreso" de Guadalajara es la que marca el rumbo de los toreros, al estar cerrada La México.
"La responsabilidad de Guadalajara te hace ver las cosas de diferente manera. Hoy por hoy es el parte aguas en el calendario taurino de cualquier torero", dijo.
Finalmente, comentó que ojalá en la Feria de Aguascalientes se programe un festejo de rejones, pues eso sería un gran escaparate para el momento que vive el rejoneo: "Hace muchos años que no se da, me parece que desde 2005, pero ahí sí hay que picar piedra. Ojalá puedan montar una corrida de rejones, en tanto nosotros seguimos al pie del cañón. Esperemos que sea un buen año, ya empezamos bien y vamos a seguir en ese tenor", finalizó.