Los carteles de la próxima Feria de San Isidro ya son oficiales, y hoy se confirmó lo que se venía comentando con insistencia en días pasados: la presencia de cuatro toreros mexicanos en la plaza de Las Ventas, una representación más que digna que siempre llenará de entusiasmo y orgullo a la afición de esta orilla del Atlántico.
Y aunque cuatro parezcan "muchos" los que van a ir este año a Madrid, lo cierto es que, considerando a México como una potencia taurina, son más bien pocos esos que están incluidos en los carteles, y esta cifra no tiene nada qué ver todavía con aquella época en que la empresa Taurodelta, con el decidido apoyo de Manuel Martínez de Erice, los nuestros ocuparon más puestos que nunca en la historia reciente de la plaza de la calle de Alcalá.
De hecho, en el año 2012 llegaron a torear un total de siete matadores y un novillero. Se trataba de Zotoluco, Fermín Spínola, Ignacio Garibay, El Payo, Juan Pablo Sánchez, Arturo Saldívar, Diego Silveti, y el entonces prometedor novillero Sergio Flores, que en septiembre de ese año recibió la alternativa en Francia.
De esa grata bonanza propiciada por Taurodelta en años pasados, a la escasez de puestos para los mexicanos en la etapa de la empresa Plaza 1, que comenzó su gestión en 2017, todavía hay una amplia brecha que esperemos se vaya estrechando conforme los toreros aztecas se justifiquen y hagan ver que su presencia representa un aire fresco que siempre viene bien a la diversidad que debe existir en este espectáculo.
De los que van a ir este año a Las Ventas, cabe mencionar que El Payo no torea en Madrid desde el 9 de mayo de 2015, cuando enfrentó toros de Fuente Ymbro, con un balance de palmas tras aviso y silencio. Al año siguiente se quedó anunciado el día 10 de mayo, en una corrida que se suspendió por lluvia. Y Arturo Saldívar no comparece desde el 10 de mayo de 2015, fecha en la que tuvo un resultado de silencio en su lote.
Tanto Leo Valadez como Isaac Fonseca se ganaron a ley su repetición en esta próxima Feria de San Isidro. El hidrocálido cortó una oreja a un toro de Torrealta, el día de su confirmación de alternativa, mientras que el moreliano toreó como novillero dos tardes y, en la segunda, conquistó una oreja tras sufrir una cornada y una fractura de mandíbula.
En medio de ambas actuaciones, también quedó para el recuerdo la valiente y profesional actuación de Joselito Adame, que se sobrepuso a una espeluznante voltereta con un gran sentido del pundonor y dejó intacto su bien ganado cartel en el primer coso del mundo.
Sin embargo, este año no acudirá a Las Ventas y tendrá que asimilar esta lamentable injusticia sin ninguna amargura, sabedor de que sigue siendo el espada mexicano con más paseíllos y lauros en Madrid en los últimos 50 años, con un total de 17 corridas toreadas y el corte de cinco orejas.
Bien dicen que la plaza se moverá de su sitio y José tampoco. Así que, seguramente, algún día volverá a demostrar que su jerarquía aún sigue vigente entre los toreros mexicanos.