En una ciudad famosa por sus torres de la catedral como lo es Guadalajara, Jalisco, "La Perla de Occidente", un "Pontífice" vino a darle el espaldarazo al joven matador Héctor Gutiérrez y, por su nobleza y bravura, regresará a la ganadería en breve al ganarse el indulto.
Para el joven hidrocálido este fue el primer indulto de su aún corta trayectoria como matador, en la que apenas el próximo 28 de noviembre cumplirá un año de haberse doctorado en esa misma plaza, que ahora lo ha erigido en un torero consentido.
"Estoy muy contento, fue una tarde muy bonita y redonda para mí. Era un cartel de mucha expectación, había muchas ilusiones puestas, gracias a Dios salió todo como yo lo pensaba y lo planeaba”, expresó luego de visitar en los corrales a su socio.
Dijo que "Pontífice", número 174, negro entrepelado, cornidelantero, con 495 kilos, de la ganadería de Jaral de Peñas, de Juan Pedro Barroso, fue un toro muy bravo, muy emotivo y completo.
"No era fácil de torear, había que estar a la altura de sus condiciones y creo que lo conseguí, pues hubo momentos muy buenos, pero, sobre todo, me quedo con la entrega de la gente, del ver cómo rugía la plaza con mi toreo. Eso es lo que más me llenó el alma de este triunfo", agregó.
Gutiérrez, quien suma 23 corridas desde su alternativa, en las que ha cortado 25 orejas y logrado este indulto, dijo que nunca vio el indulto tan claro, sino hasta el último tramo de la faena, cuando percibió que la gente estaba entregada con el toro y le pedía que lo siguiera toreando.
"Hasta entonces me empecé a dar cuenta, ya que al principio fue una apuesta constante de torear con largueza y estar bien con ese toro, centrado y firme. Fue un triunfo importante porque era un día clave; una tarde en un cartel muy importante, ante una entrada muy buena, y donde todo el mundo estaba pendiente de los resultados. Se logró sumar y ahora mismo me pone en un lugar bueno para poder seguir toreando y abrir otras puertas", indicó.
Héctor señaló que en el comienzo de su carrera siempre el triunfo será muy importante.
"Siempre un triunfo hace falta en cualquier momento de cualquier carrera porque son triunfos que te dan mucho que torear, te ponen en un sitio muy bueno y son necesarios estos triunfos, no solo cuando ya estás consolidado, sino cuando vas apenas empezando".
Finalmente, agradeció a la afición de la plaza "Nuevo Progreso" por su apoyo, en esta que fue su cuarta tarde como matador en esa plaza, pues además de la alternativa del año anterior, este año toreó el 6 de marzo y el 3 de abril, respectivamente, y donde tiene un balance de cinco orejas cortadas y el indulto de "Pontífice", cifras más que respetables en una plaza donde recibir trofeos nunca es fácil y el grado de exigencia es alto.
"Quiero agradecer a toda la afición por su apoyo el cariño y ojalá pronto pueda volver a Guadalajara, que es una plaza que le debo mucho", finalizó.