El matador de toros y abogado Rafael Carmona, ha expresado en sus redes sociales un comentario en el que explica los acontecimientos jurídicos de los últimas días en la Ciudad de México, en torno al tema de una suspensión de los festejos taurinos en el coso de Insurgentes, mas no una prohibición de los mismos, que bien merece la pena entender en los términos que él ha planteado y que reproducimos a continuación:

"Hay que dimensionar las cosas y saber que se trata solo de un amparo promovido por una Asociación  que se dice proteccionista de los animales, pero el amparo solo es un juicio donde se combaten actos de autoridad por estimarlos inconstitucionales; en este caso: los permisos emitidos por la Alcaldía Benito Juárez para la celebración de espectáculos taurinos en la Plaza Mexico.

"Como todo juicio de amparo, se sigue un procedimiento donde primero se resuelve sobre la suspensión provisional (que suele darse a la quejosa si no se afecta el interés público con dicha suspensión), y se refrenda en la suspensión definitiva como ha ocurrido en el caso al estimar el juez de distrito que la Fiesta Brava vulnera el derecho a un ambiente sano, como lo expuso en su demanda la sociedad quejosa.

"Pero dicha suspensión definitiva solamente estará vigente mientras se resuelve el fondo del amparo (unos meses) o incluso antes si es revocada por el superior jerárquico del juez mediante un recurso de revisión que seguramente promoverá la empresa de la Plaza México como tercero interesado que debió ser llamado al juicio de garantías. Además, para que siga surtiendo efectos dicha suspensión, debe otorgar la quejosa una garantía de indemnizar los daños y perjuicios que origine dicha medida a la Plaza México y puede ser muy alta la cantidad, de modo que sea impagable por la quejosa y quede sin efecto la suspensión.

"Pero después este amparo terminará por una resolución donde el juez diga si la emisión del permiso por parte de la autoridad es constitucional o no y seguramente tendrá que negar el amparo porque la celebración  de las corridas de toros no viola norma jurídica alguna al no estar prohibida oficialmente en la CDMX. Si el juez (que parece simpatizar con el antitaurinismo) otorgase el amparo de manera ilegal y absurda, dicho fallo sería impugnable en revisión ante un Tribunal Colegiado de Circuito, que es el superior jerárquico del juez y cuyos tres magistrados del Poder Judicial de la Federación, seguramente revocarían la resolución y negarían el amparo a la quejosa al no ser inconstitucional la celebración del espectáculo taurino.

"Así que es mucho ruido lo que se ha hecho por tan solo un amparo promovido por particulares que ha originado una suspensión que no podrá sostenerse en el tiempo… y mientras nos afectan a los aficionados, a los trabajadores vinculados al espectáculo taurino y a la empresa que no puede continuar dando festejos.

"Sin embargo, este amparo puede convertirse al final en un criterio que apuntale la fiesta brava al constituir un precedente de que es algo apegado a la constitución y que debe preservarse en respeto a las libertades fundamentales de acudir o no a la plaza que tiene cualquier ciudadano que encuentre en la Fiesta Brava los valores de belleza, valentía, integridad, protección ecológica del toro como especie y de su entorno en la dehesa, tradición y fuente inagotable de inspiración para artistas, además de fuente de empleo y sustento de miles de familias. Al tiempo".

Cabe mencionar que Rafael Carmona se presentó como novillero en la Plaza México en 1979 y se doctoró en 1983 en la plaza guanajuatense de Celaya, el 26 de junio, de manos del maestro Eloy Cavazos y como testigo Mariano Ramos, con toros de la ganadería de La Paz.