La Feria de Aguascalientes avanza por buen camino, y a lo largo de los últimos días se han registrado triunfos importantes de varias figuras del toreo y, sobre todo, de los toreros jóvenes que se quieren colocar, en una época en la que las oportunidades escasean y hay que apretarse los machos para conseguir nuevos contratos.
Hasta ahora, el que le ha puesto nombre al serial es Andrés Roca Rey, que en dos tardes cortó cinco orejas y demostró que lo suyo va en serio, pues a su consabido valor le ha añadido un toreo de más expresión que impactó al público. El peruano hizo cuatro faenas distintas, pero igualmente interesantes, siendo la de "Cocinero", el exigente toro de Bernaldo de Quirós, la más importante realizada en el ruedo de la monumental en este primer tramo de la feria.
La otra faena destacada de Roca Rey fue la del toro "Apasionado", de Teófilo Gómez, al que toreó con sentimiento y dimensión, en la misma corrida en que Juan Pablo Sánchez se topó con "Inspiración", un toro de bandera al que cuajó a placer, pero que no remató debidamente con la espada.
El dramático triunfo de Gerardo Adame con el bravo "Coloso" de Corlomé, ha sido otro de los momentos intensos del serial, y el hidrocálido se recupera lentamente de la fractura de cuatro costillas que le quitaron varias fechas que tenía en estos días en que la actividad taurina en México vive jornadas de gran efervescencia.
En la lista de triunfos puntuales también hay que destacar la faena de Diego San Román al toro "Candidato", de Fernando de la Mora. La reciedumbre del queretano, sumado al terso acabado de sus muletazos, fueron de auténtico lujo con un ejemplar que tuvo un gran fondo de nobleza.
Tampoco se han quedado atrás Héctor Gutiérrez, que realizó una faena importante a "Titán", de la divisa de De la Mora, otro de los ejemplares sobresalientes. La hondura de su toreo quedó patente en una faena vibrante con la que cortó la primera oreja de la feria. Y a este triunfo juvenil hay que sumar el que obtuvo Luis David del día de San Marcos, que estuvo cargado de frescura y dinamismo, así como la entrega desplegada por otros dos espadas de nuevo cuño: Leo Valadez y Miguel Aguilar que, sin cortar orejas, también mostraron sus cualidades y gustaron a la gente.
Durante su paso por Aguascalientes, El Juli ha dejado patente su raza de figura, y si solamente cortó una oreja fue porque tuvo que remar contracorriente ante toros que no ofrecieron posibilidades de lucimiento. El madrileño dio la cara con una enorme disposición, buscando dar réplica al primer triunfo de Roca Rey.
Y aunque torearon en carteles separados, se percibe el afán de mantener su caché y estar a la altura de aquellos que vienen empujando con fuerza, en el marco de una feria a la que todavía le quedan muchas emociones por vivir en las próximas corridas.